Jamie Foxx: Regresa a la acción en ‘Sleepless’

California, Estados Unidos

Se estrenó el 13 de enero en todo Estados Unidos y es protagonizada también por Michelle Monaghan y Dermot Mulroney, “Sleepless” presenta a Jamie Foxx como Vincent Downs, un policía de Las vegas cuya vida personal se está yendo al garete por su obsesión de investigar el bajo mundo de las drogas.

Cuando una redada de narcotraficantes sale mal, uno de los capos de la droga toma venganza secuestrando al hijo adolescente de Downs y este tiene que correr contra el reloj para salvarle la vida.

Foxx fue el primero en ser contratado para la película y le dio su aprobación al director Baran bo Odar, conocido por Who Am I (2014).

Odar es conocido por darles a sus actores un resumen en una sola palabra que describe al instante a sus personajes. La palabra de Monaghan fue “enojada.” ¿Cuál fue la de Foxx?

“Sensual”, dice provocativamente. “Él me habló de la sensualidad del personaje. Entre una toma y otra, él me susurraba: ‘¡Sensual!’. Eso era lo único que yo necesitaba”. El exuberante actor se pone a cantar: “Policías y ladrones sensuales. ¡Estamos jugando a los policías y ladrones sensuales!”.

Foxx se pone más serio –solo un poco más serio– al hablar de las razones de que le atrajera el papel.

“Pensé que se trataba de un papel excelente para mí”, indica. “Es un personaje con varias capas, en cierto modo, y nadie sabe exactamente si es bueno o malo. Eso no se sabe de un momento a otro. Nunca sabemos de sus luchas. En lo personal, estos personajes que no son del todo bueno ni del todo malos me parecen mucho más interesantes de observar”.

Odar afirma que le asombró la capacidad de Foxx de entrar y salir de su personaje.

“En uno de esos largos días de rodaje”, relata el director, “estábamos en la hora 14, todos agotados. Jamie estaba en un auto y necesitaba escapar. Entre una toma y otra, Jamie estaba tan cansado de llevar a cabo sus acrobacias que se estaba quedando dormido al volante. Pero cuando grité ‘¡acción!’, él de inmediato se concentró en su papel. Y cuando grité ‘¡corte!’ se volvió a dormir”.

Foxx hizo muchas de sus escenas de acción, ninguna de las cuales fue más difícil que la que requirió que Monaghan, en su papel de una policía compañera de Downs, le pegara en la cara. Ella lo hizo quizá con demasiado brío y le rompió uno de los dientes frontales por la mitad.

“Yo le dije que le siguiera durante la toma, aunque yo estaba sangrando por la boca y a ella se le partió el nudillo”, recuerda Foxx. “Al día siguiente, mi mejor amigo, que es dentista, vino al foro y me lo arregló con un poco de porcelana”.

“Hay que pasarla bien en la vida”, asegura Foxx. “Nunca olvido que estoy haciendo algo llamado fantasía. Trabajo en Hollywood, por Dios. No soy de los que dicen: ‘¡otra jornada de trabajo de catorce horas! Y lo único que tienen es agua Evian. Y el servicio de comidas es una porquería’. No, yo trato de hacerlo donde todavía haya forma de pasarla bien cada día”.

A veces esa es una lección importante para enseñar.

“Recuerdo cuando estaba haciendo Any Given Sunday (Un domingo cualquiera, 1999), refiere Foxx. “Los tipos que interpretaban a los jugadores de fútbol llevaban ocho horas seguidas estrellándose la cabeza unos a otros. En la cancha pude ver que estaban a punto de renunciar después de tantas horas. “En el momento en que el director Oliver Stone gritó ‘¡acción!’, los tipos que iban a jugar fútbol corrieron para salir de la cancha”, continúa. “Pude ver a Oliver de pie en medio de la cancha preguntándose qué había ocurrido”.

Foxx decidió intervenir en ese momento. “Cuando llegué con ellos, les dije: ‘¡Están haciendo una película! ¿Saben cuánta gente quisiera hacerlo? Ustedes están haciendo algo que es un sueño, así que hagámoslo y métanse a la cancha’”.

“Mire, yo no creo en eso de ‘guay de mí’”, agrega Foxx. “Y creo que esa es una de las claves para una vida feliz”.

Foxx, cuyo nombre real es Eric Morlon Bishop, nació en Terrell, Texas, y fue adoptado por sus abuelos maternos a raíz de que se divorciaron sus padres. Fue un comediante natural en su escuela y a los cinco años empezó a tocar el piano. Cuando se desvanecieron sus sueños de llegar a ser estrella del fútbol en la vida real, Foxx estudió música en la Universidad Internacional de Estados Unidos en San Diego, especializándose en música clásica y composición. Para entonces, sin embargo, ya había empezado a hacer sus pininos en la comedia en vivo.

Las noches de aficionados lo llevaron a ser contratado por los clubes y luego a papeles regulares en las series In Living Color (1990-1994), Roc (1992-1993) y después en su propia comedia The Jamie Foxx Show (1996-2001).

Para cuando ese programa salió del aire, Foxx ya tenía la mira puesta en la pantalla grande. Interpretó papeles secundarios de peso en Any Given Sunday y en Ali (2001), cuando su programa todavía estaba trasmitiéndose.

Pero después se dedicó de lleno al cine con Collateral (2004), Ray (2004), Jarhead (2005), Dreamgirls (2006), The Soloist (2009), Django Unchained (2012), Annie (2014), entre otras.