Miami, Estados Unidos
Son ricos, bellos y famosos, pero también son seres humanos de carne y hueso que tienen problemas y enfermedades como el resto de los mortales.
Tal es el caso de la cantante Lady Gaga, quien recientemente confesó que lucha contra el trastorno de estrés postraumático (TEPT) desde que era adolescente. Pero Stefani Joanne Germanotta, como se llama en realidad, no es la única famosa que ha sufrido problemas mentales.
El pasado noviembre, la actriz Amanda Seyfried se sinceró con la revista Allure y dijo que lleva varios años luchando contra el trastorno obsesivo compulsivo (TOC). A estas dos famosas rubias se unen artistas de la talla de Mel Gibson, Jim Carrey, Demi Lovato, Catherine Zeta Jones y el rapero Kanye West, a quien internaron hace unos días tras sufrir un colapso mental por exceso de estrés.
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Catherine Zeta-Jones
La actriz galesa y esposa del también actor Michael Douglas confesó en 2011 que padecía un trastorno bipolar.
Amanda Seyfried “Es una enfermedad que afecta a miles de personas, y yo soy una de ellas”, declaró la intérprete a la revista People en aquel entonces.
En su lucha contra ese padecimiento se internó en el hospital mental de Connecticut y recibió tratamiento.
La guapa Catherine comentó que su revelación motivó a otros que sufren el mismo trastorno a buscar ayuda.
La bella actriz, que espera su primer hijo al lado de su prometido Thomas Sadoski, es otra de las celebridades que tiene que lidiar con una enfermedad mental.
Durante una entrevista con la revista Allure, la rubia manifestó que padecía trastorno obsesivo compulsivo desde que tenía 19 años y que lleva más de 11 años tomando medicamento para ello. “Una enfermedad mental es una cosa que la gente incluye en una categoría diferente, pero se debe tomar tan en serio como cualquier otra cosa”, expresó.
Lady Gaga
La cantante reveló que lucha contra el trastorno de estrés postraumático (TEPT) desde que tenía 19 años, ya que a esa edad fue víctima de un abuso sexual que la dejó marcada para siempre.
La cantante hizo la revelación durante una entrevista televisiva el pasado lunes en un refugio de Nueva York para jóvenes homosexuales y lesbianas (LGBT) que no tienen un hogar.
“Les dije a los niños que sufro de una enfermedad mental; sufro de TEPT”, dijo Gaga al programa “Today Show” de la cadena de televisión NBC.
Amanda Bynes
A la protagonista de “Hairspray” le diagnosticaron trastorno bipolar y maniaco-depresivo. Esto hizo que se metiera en muchos problemas como conducir de forma peligrosa e intentar provocar un incendio. La actriz tuvo que ser internada en una clínica psiquiátrica para controlar su enfermedad.
Hayden Panettiere
Un año después del nacimiento de su hija Kaya, la actriz habló sobre la fuerte depresión posparto que sufrió al poco tiempo de dar a luz. “Estoy orgullosa de ser una portavoz de las mujeres que pasan por lo mismo que yo; sepan que no están solas, busquen ayuda”, dijo a Entertainment Tonight.
Demi Lovato
Durante años, la cantante Demi Lovato le ha hecho frente a problemas como la bulimia, el desorden bipolar y la adicción al alcohol y las drogas.
Por fortuna, la intérprete aprendió a lidiar con ello con ayuda de especialistas y ahora se muestra mucho más tranquila y estable.
Kanye West
Hace unas semanas, al rapero estadounidense Kanye West lo internaron por sufrir un colapso mental que le provocó el exceso de estrés y trabajo. Otro de los motivos que condujo a que West perdiera la razón fue la paranoia que causaron sus fricciones con los cantantes Jay Z y Beyoncé.
Jim Carrey
Aunque el intérprete canadiense posee un carácter gracioso que lo ha llevado al éxito en su carrera actoral, Carrey ha señalado que no solamente sufre de episodios depresivos severos, sino que tambiénvtuvo que abandonar el medicamento Prozac por el riesgo de sufrir una adicción.
De la misma forma ha señalado que la actuación ha sido una vía de escape para lidiar con ese problema.
Brooke Shields
La actriz Brooke Shields fue una de las primeras famosas en ser vocera de las mujeres que han sufrido depresión posparto. En 2003, la intérprete confesó que tuvo varios episodios depresivos y que incluso tuvo pensamientos suicidas luego de dar a luz a su hija Rowan. “No podía cargarla (a la niña), no podía cantarle y no podía sonreírle... Todo lo que yo quería hacer era desaparecer y morir. Yo no debería existir y el bebé estaría mejor sin mí”, manifestó Shields en aquella época.
Mel Gibson
Detrás de la polémica causada por el actor y director luego de sus arranques de violencia verbal y física contra sus exesposas y otras personas se encuentra también un paciente con bipolaridad y depresión.
Gibson también confesó que fue adicto al alcohol. Afortunadamente hoy está recuperado y mejor que nunca.
Jon Hamm
Pese a que parezca que el sexi y exitoso Jon Hamm pueda tenerlo todo para ser feliz, lo cierto es que el célebre actor de Mad Men sufre de depresión crónica. “La terapia te ayuda a encontrar otra perspectiva cuando estás perdido y no encuentras salida”, dijo el intérprete al diario The Guardian en 2010.
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