28/04/2024
02:12 PM

Optimismo y fe fueron las claves de su éxito

  • 16 mayo 2015 /

Arnulfo Andara Flores cultiva sus vegetales orientales en la fértil tierra del valle de Comayagua.

San Pedro Sula, Honduras

La década de los noventa marcó el inicio de la producción comercial de vegetales orientales en Honduras tales como la berenjena, bangaña, chive, cundeamor, pepino peludo y okra.Estos productos son consumidos en su mayoría por la población asiática residente en los Estados Unidos y de ahí la razón de su demanda en ese país, no así en el mercado interno hondureño, donde los ciudadanos asiáticos residentes consumen una pequeña cantidad de berenjena china.

En mayor escala, esta producción de vegetales orientales está concentrada en el valle de Comayagua y poco a poco ha ido extendiéndose en algunas zonas de Olancho y en la parte oriental del país, debido al clima propicio de esos lugares para este tipo de cultivos.

El doctor Arnulfo Andara Flores, presidente de la Empresa Exportadora de Vegetales de Comayagua (Emexco), cuenta sobre los orígenes de su compañía que data de hace 21 años, asegurando que en esa época los agricultores de la zona solo le apostaban a la exportación del café.

El empresario relata que fue uno de los pioneros en el desarrollo de dicha actividad agrícola en el valle de Comayagua, pero cuando el mercado de ese producto le fue cerrado a República Dominicana por las autoridades de Estados Unidos pudo exportarlo a esa nación del norte, demostrando así actitud catracha.

“En aquel entonces nos dedicábamos al cultivo y a la exportación del café, pero cuando vino una caída en los precios del aromático en los años del noventa optamos por vender las fincas y nos concentramos netamente en la producción y exportación de vegetales”, apunta.

Andara asegura que no le fue difícil realizar la transición de exportar café a enviar vegetales, gracias al apoyo financiero de su distribuidor en los Estados Unidos, que ha sido un gran apoyo para la empresa.En ese sentido, el empresario anuncia que en estos momentos, junto con sus socios, está desarrollando en la comunidad de Los Palillos, en la Villa de San Antonio de Comayagua, un proyecto muy ambicioso de cultivos hidropónicos de vegetales orientales en invernadero, con una cuantiosa inversión en equipos fabricados en Europa y México; ya se han construido tres naves de 10 mil metros cuadrados cada una, a la espera de hacer tres más para tener una capacidad de 60 mil metros cuadrados bajo techo.

La compañía exporta en promedio unos 500 contenedores anuales hacia Estados Unidos y algo menos hacia Europa, donde el traslado del producto se hace vía aérea.