28/04/2024
01:53 PM

Los exportadores alemanes crecen en Asia y Latinoamérica

Para la industria alemana, la tendencia de abrir nuevos mercados continuará.

Perrot GmbH & Co. fabrica relojes de campanario desde hace 150 años, pero el pedido que recibió de Arabia Saudita era de una escala completamente distinta: un reloj de 43 metros de diámetro a ser instalado a más de 400 metros de altura, en el corazón de la ciudad sagrada de La Meca.

La empresa familiar está expandiendo sus exportaciones más allá de su base tradicional de Europa, creando lazos con países en rápido crecimiento. Este cambio geográfico se repite en muchas de las 270.000 empresas industriales alemanas, que están conquistando clientes en economías emergentes de Asia y América Latina y reduciendo su dependencia de la debilitada zona euro.

El gigantesco reloj que Perrot fabricó para el Mecca Royal Clock Tower Hotel —el segundo rascacielos más alto del mundo, después del Burj Khalifa en Dubai— se puede ver desde más de ocho kilómetros de distancia. El proyecto “nos ha hecho visibles en todo el mundo árabe y más allá”, dijo Johannes Perrot, que dirige la empresa junto a sus dos hermanos.

Para la industria alemana, “la tendencia de abrir nuevos mercados continuará, dado el fuerte crecimiento económico y la sólida inversión de capital en los mercados emergentes”, prevé Ilja Nothnagel, asesor de comercio exterior de la Cámara Alemana de Comercio e Industria, en Berlín.

Compañías como la automotriz Volkswagen AG llevan la delantera en la búsqueda de mercados más allá de Europa. Pero un creciente número de pequeñas y medianas empresas alemanas, especialmente las que operan en mercados de nicho, también se están desacoplando de Europa. “Si dependiéramos solamente de la zona euro, la empresa sería menos estable”, observó Stefan Klebert, presidente ejecutivo de Schuler AG, fabricante de prensas especializadas para monedas, autopartes y otros productos metálicos.

La reputación de las compañías alemanas por la calidad de su ingeniería, una codiciada combinación de equipo especializado con productos de alto nivel y años de esfuerzos por aumentar la competitividad están haciendo que los productos alemanes ganen adeptos en las economías emergentes.

Se pronostica que los países BRIC (Brasil, Rusia, India y China) impulsen el crecimiento económico global el próximo año, mientras que la zona euro volvería a contraerse en 2013. Las exportaciones alemanas a los países BRIC se han multiplicado al menos siete veces desde 1996 y sumaron 121.200 millones de euros (US$156.700 millones) en 2011.

“Las compañías alemanas de ingeniería ahora venden tres veces más a países BRIC que a los países de la periferia de la zona euro, es decir Italia, España, Irlanda, Portugal y Grecia”, manifestó Ralph Wiechers, economista jefe de la federación alemana de ingeniería VDMA, que representa a unas 3.100 compañías de tamaño mediano.

Sabine Herold, socia gerente de DELO Industrial Adhesives, dijo que su compañía se siente atraída por el crecimiento potencial de mercados como China y el Sudeste Asiático. “Proveemos adhesivos especiales para las industrias de electrónicos y microelectrónicos, y se ubican principalmente en Asia”, señaló. DELO emplea a unas 300 personas.

Las exportaciones alemanas crecieron 4,8% entre enero y octubre frente al mismo lapso del año anterior, impulsadas por un alza de 11% en las exportaciones a países fuera de la Unión Europea, según datos recientes de la oficina federal de estadísticas de Alemania. Las ventas a la zona euro, en cambio, cayeron 1,2%.

La mayoría de las empresas alemanas aclaran que los mercados europeos siguen siendo una parte fundamental de sus negocios.

Se espera que Francia, por ejemplo, mantenga su lugar como el mayor socio comercial de Alemania en los próximos años. China, no obstante, desplazaría a Francia como principal destino de las exportaciones alemanas para 2030, según las previsiones de los economistas del banco británico HSBC.

La zona euro absorbió 37,6% de las exportaciones alemanas durante el primer trimestre, comparado con 51,6% en 1991, según la oficina federal de estadísticas del país.

“El crecimiento futuro provendrá principalmente de fuera de la zona euro”, dijo Kleber, el presidente ejecutivo de Schuler, el fabricante de prensas. “Asia, y China en particular, Estados Unidos y Brasil son mercados clave para nosotros”, agregó. Cerca de un tercio de las ventas de Schuler provienen de Asia, frente a apenas 5% en 2000.

Perrot también se ha internacionalizado. En las cinco últimas generaciones, la familia Perrot ha pasado de fabricar relojes para las iglesias de los pueblos de la Selva Negra, donde su ubica la empresa, a ser un proveedor global. Perrot recientemente ha fabricado grandes relojes para catedrales en San Petersburgo, en Rusia, y en el estado de São Paulo, en Brasil, así como para hoteles, estaciones de trenes y edificios públicos alrededor del mundo.