Una inesperada caída de la producción manufacturera en noviembre pasado hace temer que el Reino Unido vuelva a caer en recesión, según coinciden en valorar los analistas tras conocerse los últimos datos oficiales.
La Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) informó de que la producción de las fábricas cayó el 0.3% en noviembre con respecto a octubre, que se suma al retroceso del 1.3% experimentado ya ese mes.
La producción industrial, una medida más general que incluye otros sectores como la minería, subió un 0.3%, muy por debajo del 0.8% pronosticado sobre la base de que aumentaría la producción de petróleo por la apertura de nuevos pozos en el Mar del Norte.
El sector de la construcción se contrajo un 3.4% en noviembre, lo que, a juicio de los expertos, apunta a que la economía general ha podido contraerse en el cuarto trimestre del año.
Si esto fuera así -las cifras preliminares del producto interior bruto (PIB) para ese último trimestre no se conocerán hasta el 25 de enero-, el Reino Unido podría afrontar un nuevo período recesivo, determinado por dos trimestres consecutivos de contracción económica.
Los expertos son pesimistas sobre el rendimiento de la economía a principios de este año, para cuando se ha pronosticado mal tiempo y una actividad económica ralentizada. Con dos nuevos trimestres de contracción -el último de 2012 y el primero de 2013-, el Reino Unido estaría en su tercera recesión desde la crisis crediticia de 2008.
Antecedentes
Tras un período recesivo de varios meses entre 2008 y 2009, hubo otro entre finales de 2011 y la primera mitad de 2012. La economía británica salió de esta segunda recesión en el tercer trimestre del año pasado, pero los últimos indicadores económicos, incluidos los anunciados, hacen temer una vuelta a finales de año al PIB negativo.
Durante el primer trimestre del año 2011, la economía se contrajo un 0.2%. Sin embargo con el crecimiento registrado en 2012 salió oficialmente de ese período.
En el tercer trimestre del año anterior registró un crecimiento del PIB del 1% según datos publicados por la ONS.
La economía británica creció gracias al impulso de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos realizados en la ciudad de Londres entre julio y agosto del año pasado.
El instituto estadístico británico destacaba entonces que el aporte a la actividad proveniente de esa celebración sumado a la venta de localidades, por los puestos de trabajo generados, así como su efecto indirecto en el sector hotelero y de distribución minorista, fueron claves para la recuperación.
