San Pedro Sula, Honduras.
Es muy temprano todavía para calificar la gestión del gobierno de Juan Orlando Hernández en relación con la reducción de la pobreza, pero cualquier medida que esté orientada a reducir los niveles de desigualdad es apropiada.
Así lo afirma Humberto López, director de la unidad de Reducción de la Pobreza y Gestión Económica del Banco Mundial (BM) para Latinoamérica y El Caribe, en una entrevista con LA PRENSA.
El ejecutivo habla también sobre el posible acuerdo económico entre Honduras y el Fondo Monetario Internacional (FMI) y expone sus puntos de vista sobre algunas medidas para mejorar las finanzas públicas hondureñas.
-¿Cómo toma el BM el visto bueno del Fondo Monetario Internacional para negociar un acuerdo económico con Honduras?
Lo tomamos con mucha ilusión. El Gobierno ha venido tomando una serie de medidas difíciles desde que llegó al poder.
Estas medidas, aparte de ser complicadas, desde el Banco Mundial las vemos con muy buenos ojos.
La situación del país cuando llegó el nuevo Gobierno era bastante complicada, y se han empezado a atacar algunos problemas como el déficit fiscal, y a adoptar medidas estructurales que son necesarias para que el país crezca.
-¿Que otras medidas debería implementar el Gobierno?
En este momento el Gobierno estudia otras medidas, sobre todo en la mejora de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee) y atacar el déficit que tiene actualmente, que es muy complicado.
Los precios de la energía deberían de estar más alineados con otros países. Con esto no quiero decir que hay que subsidiar sino tratar de poner más sostenible la empresa. Ese es uno de los puntos críticos que se van a ver en los meses venideros, porque no es decisión que va a cambiar a la Enee de la noche a la mañana. Esto requiere de un trabajo.
También se han preocupado por los niveles de desigualdad del país que son bastantes altos. Pero enfatizaría en el problema que tiene la Enee, que yo creo que requiere mayor atención, donde el Banco Mundial está trabajando con el Gobierno para mejorar la actividad y la exigencia de la empresa.
Además, hay una serie de políticas sociales que también requieren atención.
-¿Cuáles serían esas políticas?
Por ejemplo, estamos colaborando con el Gobierno en el tema del Bono Diez Mil. Tenemos un estudio reciente del Banco Mundial que revela que en las zonas rurales este bono podría estar contribuyendo a una rebaja de la pobreza en un 3%, que si lo traducimos en personas anda alrededor del cuarto de millón; es decir, que unas 240 mil personas están saliendo de la pobreza.
-En ese sentido ¿cómo considera el desempeño del Gobierno en relación con la reducción de la pobreza?
Es muy poco tiempo, pero cualquier medida o preocupación que tenga el Gobierno en lo que respecta a desigualdad lo vemos muy bien. Para el Banco Mundial es muy importante apoyar y dialogar los esfuerzos que haga el Gobierno.
-¿De cuánto es la cartera del Banco Mundial?
En este momento tenemos $390 millones comprometidos. Nuestros desembolsos vienen de los proyectos que están aprobados.
Gran parte de los desembolsos de este monto va a depender de la ejecución de diferentes proyectos que estamos trabajando.
-¿Existirá desembolso para Honduras?
Nosotros trabajamos por estrategias. Estamos en proceso de una nueva estrategia para Honduras. Hemos empezado a tener nuevos diálogos con el Gobierno para ver cuáles son las áreas en que podemos estar apoyando y esperamos contar con más recursos que los que tuvimos en la anterior estrategia.
-¿En qué enfocarán esta próxima estrategia?
Esta será de cuatro años y donde posiblemente estaremos orientando nuestra estrategia es en torno a los pilares que tenga el Gobierno. Hemos visto que se ha orientado en la generación de empleo, gobernabilidad y lucha contra la corrupción, que son áreas donde el Banco se encuentra muy cómodo.
Lo que está haciendo el Gobierno es una base que pueda atraer la inversión privada y que se transmita en aumento de empleo y eso será fundamental en estos momentos.
-¿Cómo puede Honduras atraer la inversión?
Existen tres elementos: una parte es liderazgo del Gobierno y creo que lo está demostrando. Otro punto es el manejo macroeconómico. En ese sentido, los últimos avances, como lo del directorio del Fondo Monetario, van en la dirección correcta.
Otra parte es el clima de inversión; es decir, cómo se puede hacer para facilitar la creación de una empresa que desee llegar a Honduras; agilizar los permisos y además que se asegure a las nuevas inversiones que tendrán tarifas eléctricas competitivas a otras regiones, entre otros aspectos.
Estamos en una economía más globalizada, creo que hay que tener en cuenta que el mercado hondureño es pequeño y para venir aquí tienen que llegar con una vocación exportadora para ser competitivos.
-¿Cuáles son los riesgos de que el país siga sobreendeudado?
No se puede decir que el país está en nivel de deuda alarmante, en el sentido de decir que esta sería la primera prioridad. Hay que pensar un poco sobre cómo es la dinámica de la deuda: uno no quiere que se le vaya de las manos y las medidas que ha tomado el Gobierno son correctas, orientadas a tener una deuda controlable.
-¿De qué dependerá el éxito de la gestión económica de la presente administración?
Creo que esto se debe enfocar por la parte de los riesgos que tienen. El precio del petróleo ha subido mucho. No hay duda que el precio del petróleo para los países consumidores, como Honduras, no es positivo.
Un segundo elemento que yo consideraría es que la economía global se está desacelerando.
Hace un año teníamos unas proyecciones de crecimiento para la región latinoamericana de casi el 4% y ahora estamos hablando de un crecimiento de 1.9%. Esto quiere decir que los exportadores hondureños se van a encontrar con un poquito más de dificultad para exportar.
Estos son riesgos que existen y esperamos que no se materialicen, pero es importante tenerlos en consideración.
Es muy temprano todavía para calificar la gestión del gobierno de Juan Orlando Hernández en relación con la reducción de la pobreza, pero cualquier medida que esté orientada a reducir los niveles de desigualdad es apropiada.
Así lo afirma Humberto López, director de la unidad de Reducción de la Pobreza y Gestión Económica del Banco Mundial (BM) para Latinoamérica y El Caribe, en una entrevista con LA PRENSA.
El ejecutivo habla también sobre el posible acuerdo económico entre Honduras y el Fondo Monetario Internacional (FMI) y expone sus puntos de vista sobre algunas medidas para mejorar las finanzas públicas hondureñas.
-¿Cómo toma el BM el visto bueno del Fondo Monetario Internacional para negociar un acuerdo económico con Honduras?
Lo tomamos con mucha ilusión. El Gobierno ha venido tomando una serie de medidas difíciles desde que llegó al poder.
Estas medidas, aparte de ser complicadas, desde el Banco Mundial las vemos con muy buenos ojos.
La situación del país cuando llegó el nuevo Gobierno era bastante complicada, y se han empezado a atacar algunos problemas como el déficit fiscal, y a adoptar medidas estructurales que son necesarias para que el país crezca.
-¿Que otras medidas debería implementar el Gobierno?
En este momento el Gobierno estudia otras medidas, sobre todo en la mejora de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee) y atacar el déficit que tiene actualmente, que es muy complicado.
Los precios de la energía deberían de estar más alineados con otros países. Con esto no quiero decir que hay que subsidiar sino tratar de poner más sostenible la empresa. Ese es uno de los puntos críticos que se van a ver en los meses venideros, porque no es decisión que va a cambiar a la Enee de la noche a la mañana. Esto requiere de un trabajo.
También se han preocupado por los niveles de desigualdad del país que son bastantes altos. Pero enfatizaría en el problema que tiene la Enee, que yo creo que requiere mayor atención, donde el Banco Mundial está trabajando con el Gobierno para mejorar la actividad y la exigencia de la empresa.
Además, hay una serie de políticas sociales que también requieren atención.
-¿Cuáles serían esas políticas?
Por ejemplo, estamos colaborando con el Gobierno en el tema del Bono Diez Mil. Tenemos un estudio reciente del Banco Mundial que revela que en las zonas rurales este bono podría estar contribuyendo a una rebaja de la pobreza en un 3%, que si lo traducimos en personas anda alrededor del cuarto de millón; es decir, que unas 240 mil personas están saliendo de la pobreza.
-En ese sentido ¿cómo considera el desempeño del Gobierno en relación con la reducción de la pobreza?
Es muy poco tiempo, pero cualquier medida o preocupación que tenga el Gobierno en lo que respecta a desigualdad lo vemos muy bien. Para el Banco Mundial es muy importante apoyar y dialogar los esfuerzos que haga el Gobierno.
-¿De cuánto es la cartera del Banco Mundial?
En este momento tenemos $390 millones comprometidos. Nuestros desembolsos vienen de los proyectos que están aprobados.
Gran parte de los desembolsos de este monto va a depender de la ejecución de diferentes proyectos que estamos trabajando.
-¿Existirá desembolso para Honduras?
Nosotros trabajamos por estrategias. Estamos en proceso de una nueva estrategia para Honduras. Hemos empezado a tener nuevos diálogos con el Gobierno para ver cuáles son las áreas en que podemos estar apoyando y esperamos contar con más recursos que los que tuvimos en la anterior estrategia.
-¿En qué enfocarán esta próxima estrategia?
Esta será de cuatro años y donde posiblemente estaremos orientando nuestra estrategia es en torno a los pilares que tenga el Gobierno. Hemos visto que se ha orientado en la generación de empleo, gobernabilidad y lucha contra la corrupción, que son áreas donde el Banco se encuentra muy cómodo.
Lo que está haciendo el Gobierno es una base que pueda atraer la inversión privada y que se transmita en aumento de empleo y eso será fundamental en estos momentos.
-¿Cómo puede Honduras atraer la inversión?
Existen tres elementos: una parte es liderazgo del Gobierno y creo que lo está demostrando. Otro punto es el manejo macroeconómico. En ese sentido, los últimos avances, como lo del directorio del Fondo Monetario, van en la dirección correcta.
Otra parte es el clima de inversión; es decir, cómo se puede hacer para facilitar la creación de una empresa que desee llegar a Honduras; agilizar los permisos y además que se asegure a las nuevas inversiones que tendrán tarifas eléctricas competitivas a otras regiones, entre otros aspectos.
Estamos en una economía más globalizada, creo que hay que tener en cuenta que el mercado hondureño es pequeño y para venir aquí tienen que llegar con una vocación exportadora para ser competitivos.
-¿Cuáles son los riesgos de que el país siga sobreendeudado?
No se puede decir que el país está en nivel de deuda alarmante, en el sentido de decir que esta sería la primera prioridad. Hay que pensar un poco sobre cómo es la dinámica de la deuda: uno no quiere que se le vaya de las manos y las medidas que ha tomado el Gobierno son correctas, orientadas a tener una deuda controlable.
-¿De qué dependerá el éxito de la gestión económica de la presente administración?
Creo que esto se debe enfocar por la parte de los riesgos que tienen. El precio del petróleo ha subido mucho. No hay duda que el precio del petróleo para los países consumidores, como Honduras, no es positivo.
Un segundo elemento que yo consideraría es que la economía global se está desacelerando.
Hace un año teníamos unas proyecciones de crecimiento para la región latinoamericana de casi el 4% y ahora estamos hablando de un crecimiento de 1.9%. Esto quiere decir que los exportadores hondureños se van a encontrar con un poquito más de dificultad para exportar.
Estos son riesgos que existen y esperamos que no se materialicen, pero es importante tenerlos en consideración.
