26/04/2024
04:13 PM

IBM potencia su supercomputadora Watson

  • 09 enero 2014 /

El proyecto aún no ha rendido los frutos esperados.

Tres años después de que International Business Machines Corp. se fijó la tarea de transformar su supercomputadora Watson en un motor de ganancias, los ingresos todavía están lejos de alcanzar las ambiciosas metas de la empresa.

La presidenta ejecutiva de IBM, Virginia Rometty, ha indicado a los ejecutivos que espera que Watson genere ingresos anuales en torno a los US$10.000 millones en 10 años, según una transcripción de una conferencia telefónica de octubre de 2013 a la que tuvo acceso The Wall Street Journal.

Estableció esa meta después de que el ejecutivo que en ese momento estaba a cargo de Watson indicó que el negocio aportaría US$1.000 millones en ingresos al año para 2018. Esto convertiría a Watson en la división de IBM que alcanza la marca de los US$1.000 millones con mayor rapidez.

Sin embargo, los ingresos de Watson a finales de octubre no llegaron a US$100 millones, según la transcripción. Uno de sus primeros proyectos importantes, con el Centro M.D. Anderson para el Cáncer de la Universidad de Texas, se hallaba estancado a principios de 2013, precisó Manoj Saxena, quien supervisaba Watson.

IBM todavía cree que Watson puede llegar a ser una de las mayores innovaciones en los 103 años de historia de la empresa, junto a la computadora central y la computadora personal.

Para agilizar el ascenso de la supercomputadora, IBM anunció el miércoles la formación de una división para Watson y un fondo de capital de riesgo de US$100 millones para impulsar la creación de más aplicaciones desarrolladas en base a esta tecnología.

El fondo de capital de riesgo es parte de una inversión de más de US$1.000 millones que IBM inyectará en la nueva división de Watson, cuyos cientos de empleados actuales aumentarán a más de 2.000, informó la compañía. Muchas de las nuevas incorporaciones serán vendedores y consultores que ayudarán a clientes a concebir formas de usar Watson. “Estamos avanzando a una fase de expansión más rápida”, precisó Michael Rhodin, vicepresidente
sénior de IBM que dirigirá el negocio. Saxena sigue trabajando en la división.

“Watson ha pasado rápidamente de una iniciativa de investigación pionera en la industria a una realidad comercial” que aborda problemas sociales y empresariales, indicó un vocero de la compañía.

“IBM está logrando excelentes avances con clientes y socios en el desarrollo de Watson, y estamos entusiasmados
por el futuro de Watson como un servicio en la nube y como una tecnología que cambiará vidas”, agregó.

La diferencia clave entre Watson y otros tipos de software analítico es su capacidad de “aprender”. Si se le proporciona información sobre casos médicos, por ejemplo, Watson asignará un “puntaje de confianza” a los posibles tratamientos.

Durante la capacitación, los médicos le indican a Watson cuando hace una recomendación equivocada y la supercomputadora aprende de sus errores.

IBM está desarrollando versiones de Watson que pueden vincular a pacientes de cáncer con ensayos clínicos de medicamentos o recomendar una estrategia de inversión tras revisar el portafolio de un cliente. Watson, sin embargo, tiene dificultades para resolver problemas del mundo de los negocios, según un repaso de documentos internos de IBM y entrevistas con los primeros clientes de la supercomputadora.

Además, Watson no funciona con la tecnología de centro de datos que ofrece SoftLayer Technologies Inc., el proveedor de computación en la nube que IBM compró por US$2.000 millones.

La empresa tampoco ha encontrado una forma de generar un flujo de ingresos estable de Watson, según la conferencia telefónica de octubre. Citigroup Inc. ha estado colaborando con IBM desde marzo de 2012 para desarrollar una versión de Watson que recomiende productos financieros a los consumidores.

Una vocera de Citigroup afirmó que el banco “continúa identificando y probando usos para Watson”. Con la ayuda de la supercomputadora, la empresa de seguros médicos WellPoint Inc. determina si los tratamientos que los doctores solicitan cumplen con las normas de la empresa y la póliza de seguro del paciente.

Elizabeth Bigham, vicepresidenta de WellPoint, aseveró que a Watson inicialmente le tomó demasiado tiempo “aprender” las políticasde la aseguradora. Rometty, la presidenta ejecutiva de IBM, se reunió con el presidente ejecutivo de WellPoint, Joseph Swedish, para tratar de solucionar los problemas.

IBM rediseñó la capacitación a petición de WellPoint, y el sistema mejoró. “Ya es parte de la forma en que operamos”, señaló Bigham.