San Pedro Sula. El próximo 6 de enero abre finalmente sus puertas al público el Centro de Desarrollo Empresarial (CDE) de San Pedro Sula. Para explicar las metas y los servicios que este centro prestará a las mipymes, LA PRENSA entrevistó a su director, Ricardo Murillo.
- ¿Cuales son sus planes, objetivos y metas con el CDE?
El CDE implementará un plan operativo anual, propiciado a través de la Secretaría de Industria y Comercio y ahí están las metas de 2014, que es atender a 300 mipymes en la región Valle de Sula, a las que hemos categorizado en cinco niveles: Nuevos emprendimientos, dos categorías de microempresa (de 1 a 5 empleados y de 6 a 10); la pequeña empresa (11 a 50 empleados) y la mediana empresa (51 a 150 empleados). Esta meta seguirá aumentando a medida que se integren nuevos asesores como formadores de emprendedores.
- ¿Cuáles son los servicios que van a prestar?
Algunos de esos servicios son parte de los diagnósticos (de empresa) que se llevarán a cabo en el centro. Recibiremos a las empresas para ver cuáles son sus necesidades y sugerir planes de negocios.
-¿Qué servicios no se podrán encontrar aquí?
No somos una fuente de financiamiento, pero sí podemos ayudar a buscarlo.
-¿Por qué ha tomado tanto tiempo poner a funcionar el CDE?
Hubo una demora en cuanto a nombramientos, pero la visión de esta estrategia de desarrollo surge de la necesidad de estimular a los emprendedores para que ayuden al desarrollo. Son 16 en todo el en país. Falta abrir diez centros.
-¿Cómo está organizado el centro?
En primera instancia, la organización la encabeza un grupo de socios: cámaras de comercio, cooperativas, empresarios, universidades. Después viene la dirección del centro. Tendremos una asistente administrativa, una coordinadora de asistencia técnica. Habrá siete empleados de planta, que incluye a un coordinador de inteligencia de mercados y un coordinador de formación empresarial, que será el responsable del montaje de los eventos destinados a educar a los mipymes. Contrataremos el primer año cinco asesores en formación de emprendedores en materia técnica, administrativa, comercial. Se estima que cada asesor va a atender 60 empresas. Nos vamos a enfocar en una unidad de consultoría para que las mipymes puedan hacer mejor las cosas.
- ¿Qué aspectos han identificado en los que las mipymes tienen más necesidad?
Estamos conscientes de que hay mucho comercio informal. Una de las metas es crear una cultura de formalidad y en segunda instancia, la implementación de controles; hay muchos negocios que no llevan contabilidad ni estados financieros. Cambiar eso es una se nuestras metas. No todo será gratis, sino que los beneficiarios deberán pagar un precio simbólico. Por ejemplo, cuando se implemente un plan de negocios tras el diagnóstico de la empresa, se pagará algo así como L100 lempiras al centro, que ayudarán a sufragar algunos gastos operativos. En el caso de los pequeños, pagarían L150 y los medianos, L200.
-¿Quién los está acompañando en este esfuerzo?
Las gremiales como la Anmpih, la Apevas y agunas cooperativas, las cámaras de comercio y queremos incluir a las municipalidades.
- ¿Desde cuándo se pueden acercar a ustedes los mipymes?
A partir del 6 de enero ya nos abrimos al público. Pueden ser empresas agremiadas, pueden ser negocios individuales, alguien que quiera iniciar un negocio o tenga años de tener su negocio.
- ¿Cuál ha sido su trayectoria?
Una de las razones que nos faculta es la acreditación de la Universidad de Texas en San Antonio en el programa de los SBDC (Small Business Developement Centers), quienes nos han capacitado con un diplomado de 80 horas y bajo ese modelo es que estamos aquí. También tenemos experiencia con un par de negocios mipymes y a todo ello se suma la docencia a nivel universitario.
- ¿Tiene experiencia previa en un puesto similar?
Fui gerente de una pequeña empresa purificadora de agua que iniciamos de cero. Esa experiencia la pondré en práctica en el CDE.
