Mejorar los procesos de producción para obtener mayor rendimiento antes de pensar en expandir el área cultivada, es una de las metas del sector palmero Latinoamericano, dijo en una entrevista a LA PRENSA, Jens Mesa, presidente de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite (Fedepalma) de Colombia, el mayor productor de aceite de la región.
Nos ha afectado fuertemente: hay épocas de sequía mucho más prolongadas y época donde hay más lluvias de lo normal; esto afecta mucho los ciclos productivos del sector palmero, reduciendo su productividad, y ese ha sido uno de los mayores problemas que se tiene. Además estos fenómenos han incidido a la aparición de enfermedades y plagas que dañan las plantas.
Los productores deben tener claro que todo comienza desde que se establecen los nuevos cultivo de palma. Los productores deben hacer un estudio previo a la siembra para asentarse en lugares menos vulnerables. Por ejemplo, deben buscar un sitio donde exista abundancia de agua para poder nutrir la planta adecuadamente y que esta tenga una buena producción. Otro tema es contar con buenos suelos, y por último, la recomendación más importante: optar por implementar buenas prácticas, amigables con el ambiente.
Porque los productos que provienen de cultivos que cuentan con procesos sostenibles con el ambiente, tienen mayor demanda en el mercado mundial.
No podemos quedarnos atrás. Para poder competir, Latinoamérica debe comenzar a implementar buenas prácticas de producción amigables con el ambiente; y en ese sentido, apostarle a la certificación de Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible (RSPO).
En el mercado internacional, el aceite que tienen este sello de calidad tienen un costo un poco más alto que el normal, pero sobre todo tiene mayor demanda en el mercado mundial, y esa es una buena noticia. En el futuro tener cultivos certificados será un requisito estándar de la industria.
Van muy bien. Hoy en día, los países de Latinoamérica están trabajando muy fuerte en certificar sus plantas, van muy bien.
En Colombia, el proyecto para producir energía limpia a partir de la biomasa de la palma para la venta, está apenas iniciando. Lo que sí ya ocurre es que las plantas producen energía para su propio consumo. Pero hay países como Honduras donde este proceso va mucho más avanzado.
Yo creo que la palma es un buen reglón productivo. Sin duda, si se diversificara la oferta de productos a base de palma este rubro se convertirá en uno de los principales de Latinoamérica.
Uno deben intentar primero sacar el mejor provecho de los cultivos. El problema que se tiene ahora mismo, es que los productores tienen un bajo nivel de producción, y por eso muchos reportan pérdidas. Es por eso que antes de expandir los cultivos se debe trabajar intensamente en sacar el mejor provecho de las áreas ya cultivadas, eso nos ahorra gastos y nos permitirá sacar un mayor rendimiento.
No para nada, el mercado de palma tienen una gran demanda de aceite. Y el precio no depende de nosotros sino de los grandes productores a nivel mundial.