La aplicación del nuevo sistena de facturación en Honduras ha causado polémica por los atrasos e inconvenientes para inscribirse en ese régimen, así como por la obligatoriedad de sumar a la base de contribuyentes de la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI) a miles de personas naturales y jurídicas que no tributaban.
No obstante, son los pequeños contribuyentes, entre ellos personas naturales y microempresarios, los que mayores problemas han tenido por el limitado acceso a Internet o por la falta de una cuenta de correo electrónico.
En ese sentido, la Dirección Ejecutiva de Ingresos ha desplazado personal en varias ciudades del país para instruir a los nuevos contribuyentes sobre el sistema de facturación electrónica y enseñar los pasos para inscribirse.
Las personas naturales que realicen actividades económicas gravadas o no gravadas con impuestos que estén obligadas a emitir documentos fiscales son las que deben inscribirse.
Parte del problema desatado desde que entró en vigor el nuevo régimen de facturación se debe a la desinformación en el sector mipymes.
La DEI creó el régimen simplificado del impuesto sobre la renta (ISR) para todos los pequeños negocios.
Este método se establece para personas naturales o jurídicas que tengan un solo establecimiento de comercio y cuyas ventas no excedan de L180,000 al año, a fin de beneficiarse del trámite simplificado.