En un esfuerzo por controlar los estragos ocasionados por la plaga del insecto paratrioza, las autoridades sanitarias han decretado una veda al cultivo de la papa en la región de Occidente.
La medida afecta entre 600 y 700 manzanas de tierra dedicadas a este cultivo, ubicadas principalmente en los departamentos de Ocotepeque e Intibucá, que concentran la mayor parte de la producción nacional de papa en la zona occidental del país.
El investigador agrícola Dúliz Durón informó que la veda es producto de una mayor conciencia de parte de los productores para mejorar sus técnicas de cultivo y control de plagas, en un esfuerzo por controlar los estragos ocasionados por la enfermedad que el año pasado afectó entre el 70 y el 90% los cultivos de papa en el ámbito nacional.
“Esto beneficia porque poco a poco se va controlando el problema de la paratrioza, lo que ha afectado no sólo a los productores sino a las numerosas familias que se emplean como mano de obra para cultivar este producto”, dijo Durón, en declaraciones ofrecidas a un medio radial.
Ante la pérdida de cultivos, el mercado nacional ha buscado abastecerse de papa en los países vecinos, sobre todo de Guatemala. De acuerdo con ciertas fuentes, la cercanía de este país entraña cierto grado de riesgo de que la papa que de allí procede, también pudiera verse afectada por la paratrioza.
En cualquier caso, la plaga ha contribuido a incrementar el precio de este tubérculo en los mercados.
“Es un impacto dramático que golpea la economía del país”, comentó Durón, quien agregó que tratarán de controlar la enfermedad mediante el uso de agroquímicos como el curión, pero también fortaleciendo la parte nutricional, en un programa más estricto de control fitosanitario.
