La sala de espera de la Oficina de Trabajo estaba tan llena como lo ha estado desde el comienzo del año.
Dina Blanco, de 24 años, quien durante ocho meses laboró como operaria en una empresa maquiladora del sector de Búfalo, Villanueva, era una de las almas en el lugar, y mientras esperaba que le hicieran el cálculo de sus prestaciones, trataba de entender las razones de su despido. 'No me dieron ninguna explicación de por qué me despedían, sólo me dijeron que por reducción de personal'.
Waleska Martínez, oficial de Trabajo a cargo de los cálculos de prestaciones comentó que desde el 5 de enero pasado, es decir, desde la primera semana laboral completa de este año, los casos como el de Dina son constantes, al punto que a diario llegan unas 200 personas en busca del cálculo de sus prestaciones. 'Ésa es la capacidad de atención que tenemos', señaló Martínez.
A ese ritmo, la oficina de Trabajo de San Pedro Sula atiende a unas mil personas por semana, por lo que a esta fecha ya sumaría unas cinco mil personas en lo que va del año.
'No sé qué voy a hacer ahora', dice Dina, 'no tengo planes', comenta.
Y el cálculo rápido de la cantidad de despedidos, no está tan lejos de la realidad.
La inspectora general de la Secretaría del Trabajo, Janeth Bográn, expresó que hasta la semana anterior se habían perdido más de 9,600 trabajos en todo el país. El 58.2 por ciento de esta cifra corresponde a Tegucigalpa y el resto a San Pedro Sula, La Ceiba, Danlí y Choluteca.
Según el Consejo Hondureño de la Empresa Privada, Cohep, el país perdió casi 22,000 empleos entre diciembre de 2008 y enero de 2009.
Este cómputo no reporta a los obreros que dejaron de laborar en la economía informal.
La causa ya es conocida: el impacto generado por la crisis financiera internacional y el alza al salario mínimo.
Incalculable y no para
Intentar hacer un cálculo de cuánto han pagado las empresas hondureñas en prestaciones es casi imposible, ya que los valores dependen de la antigüedad y los salarios de cada empleado. Los rangos van desde unos dos mil lempiras para quienes fueron despedidos al apenas llevar dos meses trabajando hasta 900 mil o más de un millón de lempiras para aquellos ejecutivos cuya antigüedad supera los 30 años.
El director del Cohep, Benjamín Bográn, ya había advertido que aún sin que se elevara el salario mínimo las empresas recortarían personal a causa de la crisis financiera global. Y que por esta razón urgía encontrar un acuerdo entre empresarios, obreros y gobierno para preservar los empleos.
'Son miles y miles de obreros los que hacen fila frente a los parques industriales en búsqueda de un empleo y centenares de desempleados acuden a la Secretaría de Trabajo a que se les calculen las prestaciones laborales, así como las decenas de empresas que han anunci
ado el cierre de operaciones porque no pueden pagar el nuevo salario mínimo', indicó.
¿Qué hacer?
Ante la ola de despidos que afecta a empresas y a trabajadores, lo mejor es buscarle la cara positiva.
Las empresas, que ven sangrados sus recursos y corren el riesgo de descapitalización, 'deben buscar apoyo en las utilidades de años anteriores para lograr invertir en la producción', explicó el ex presidente del Colegio de Economista de la región, Jorge Interiano. 'Muy pocas empresas prevén las situaciones como el pago de prestaciones. Para sobrellevar el impacto del pago de las prestaciones, una buena opción es ahorrar en costos de operación, en servicios y asociarse para adquirir materias primas de una manera más cómoda. Además, muchas empresas tienen que sacar provecho al tema del reciclaje'.
Pero la principal recomendación va para los despedidos. 'No deben gastar las prestaciones. Lo primero que deben hacer es una lista de gastos ineludibles como alimentación, vivienda, servicios, educación, salud y transporte. Lo demás, deben destinarlo a buscar la forma de colocar un negocio, pero en áreas donde haya ventas y retorno de capital'.
Otros consejos
Intente colocar su dinero en instituciones bancarias que le ofrezcan márgenes de rentabilidad considerables, con los que gane y no pierda.
Si no puede pagar una deuda, trate de renegociarla para pagar los intereses o saldos mínimos. No destine todas sus prestaciones a las deudas.
Si piensa en poner un negocio, busque alguno en el que pueda aprovechar las capacitaciones que recibió en su empresa.
- Para el cálculo de prestaciones debe presentar copia de su carta de despido con su salario y el tiempo que laboró en la empresa.
- AL perderá entre 1.5 y 2.4 millones de empleos en 2009 de acuerdo con cálculos de la Organización Internacional del Trabajo, OIT.
