San Pedro Sula, Honduras.
La paralización de actividades en la aduana de El Poy, frontera entre Honduras y El Salvador, que duró alrededor de ocho horas y media, dejó pérdidas millonarias al sector transporte, informó Benjamín Castro, presidente de la Cámara de Transporte de Carga de Honduras (Catracho).
Explicó que por ese paso fronterizo circulan diariamente alrededor de 900 contenedores, lo que representa un flujo económico de entre 8 y 10 millones de lempiras.
La paralización de labores inició en la madrugada del jueves y concluyó en la tarde, debido a que en la aduana salvadoreña hay poco personal, y trabajan por intervalos. “Llevamos tres años con este problema y ayer se agudizó. El personal de aduanas de El Salvador está pidiendo un aumento salarial y por eso hay lentitud en el servicio”, detalló.
El problema se resolvió por la intervención de las máximas autoridades de El Salvador.
Autoridades nacionales
María Antonia Rivera, miembro de la Comisión Presidencial de Reforma Integral del Sistema Aduanero y Operadores de Comercio (Coprisao), explicó que la situación no era responsabilidad de las autoridades aduaneras hondureñas. No obstante, la comisión fue hasta la aduana para tomar acciones que permitieran acelerar el tránsito de las unidades de transporte.
Agregó que se comunicaron con las autoridades aduaneras y de comercio del país vecino para resolver el problema. Resultado de dicha comunicación, se reunirán hoy, viernes, en San Salvador, con el fin de abordar los reclamos del sector transporte y para resolver el problema que genera la falta de personal en el lado salvadoreño.
La paralización de actividades en la aduana de El Poy, frontera entre Honduras y El Salvador, que duró alrededor de ocho horas y media, dejó pérdidas millonarias al sector transporte, informó Benjamín Castro, presidente de la Cámara de Transporte de Carga de Honduras (Catracho).
Explicó que por ese paso fronterizo circulan diariamente alrededor de 900 contenedores, lo que representa un flujo económico de entre 8 y 10 millones de lempiras.
La paralización de labores inició en la madrugada del jueves y concluyó en la tarde, debido a que en la aduana salvadoreña hay poco personal, y trabajan por intervalos. “Llevamos tres años con este problema y ayer se agudizó. El personal de aduanas de El Salvador está pidiendo un aumento salarial y por eso hay lentitud en el servicio”, detalló.
El problema se resolvió por la intervención de las máximas autoridades de El Salvador.
Autoridades nacionales
María Antonia Rivera, miembro de la Comisión Presidencial de Reforma Integral del Sistema Aduanero y Operadores de Comercio (Coprisao), explicó que la situación no era responsabilidad de las autoridades aduaneras hondureñas. No obstante, la comisión fue hasta la aduana para tomar acciones que permitieran acelerar el tránsito de las unidades de transporte.
Agregó que se comunicaron con las autoridades aduaneras y de comercio del país vecino para resolver el problema. Resultado de dicha comunicación, se reunirán hoy, viernes, en San Salvador, con el fin de abordar los reclamos del sector transporte y para resolver el problema que genera la falta de personal en el lado salvadoreño.
