San Pedro Sula, Honduras.
A petición de la Ahiba, el nuevo mecanismo de subasta de divisas entrará en vigor el 13 de febrero y no el 23 de enero como habían acordado de forma inicial con el BCH.
“Del 100% que compran los bancos, nos van a vender el 90% y le dejamos el 10% para que atiendan sus propias necesidades”, explicó Manuel de Jesús Bautista, presidente del BCH, a medios capitalinos.
A través del Sistema Electrónico de Negociación de Divisas (Sendi), el BCH controla el tipo de cambio de la moneda.
Para el analista bancario Lenin Palencia, con esta norma hay que dimensionar tres aspectos claves, uno de ellos es que los agentes bancarios deberán de trasladar el 90% de las compras diarias de divisas que hagan, a más tardar el siguiente día hábil, al BCH.
“De manera tal que los bancos no pueden vender ese 90%, solamente el 10% de remanente que les queda”, agrega.
Las casas de cambio deben de transferir el 100%, con la misma disposición de trasladar a más tardar al día siguiente.
El segundo aspecto es que la norma contempla el funcionamiento del mercado interbancario de divisas, es decir, que si a un banco no le ajustó el 10% para vender a los clientes, puede participar en subastas para comprar divisas al BCH (máximo de $300,000 al día) o comprar a otros bancos que les haya sobrado.
A petición de la Ahiba, el nuevo mecanismo de subasta de divisas entrará en vigor el 13 de febrero y no el 23 de enero como habían acordado de forma inicial con el BCH.
“Del 100% que compran los bancos, nos van a vender el 90% y le dejamos el 10% para que atiendan sus propias necesidades”, explicó Manuel de Jesús Bautista, presidente del BCH, a medios capitalinos.
A través del Sistema Electrónico de Negociación de Divisas (Sendi), el BCH controla el tipo de cambio de la moneda.
Para el analista bancario Lenin Palencia, con esta norma hay que dimensionar tres aspectos claves, uno de ellos es que los agentes bancarios deberán de trasladar el 90% de las compras diarias de divisas que hagan, a más tardar el siguiente día hábil, al BCH.
“De manera tal que los bancos no pueden vender ese 90%, solamente el 10% de remanente que les queda”, agrega.
Las casas de cambio deben de transferir el 100%, con la misma disposición de trasladar a más tardar al día siguiente.
El segundo aspecto es que la norma contempla el funcionamiento del mercado interbancario de divisas, es decir, que si a un banco no le ajustó el 10% para vender a los clientes, puede participar en subastas para comprar divisas al BCH (máximo de $300,000 al día) o comprar a otros bancos que les haya sobrado.
Esta última transacción es conocida como mercado interbancario de divisas, que será regulado por una comisión de ventas y un control diario y mensual que llevan de las operaciones de compra y venta de divisas entre bancos.
El tercer punto de la norma versa que ahora el Banco Central puede vender directamente divisas a dos tipos de clientes o empresas: a los importadores de petróleo y a las compañías generadoras de energía eléctrica.
“Lo que busca esta norma es que las compañías que son vitales en el desarrollo económico del país puedan acceder de manera más directa a la compra de divisas”, detalla Palencia, al tiempo de aclarar que en cuanto a precios no tendrá diferenciación de los valores de la banca.
Medidas
Analistas consultados refieren que con esta medidas los bancos quedarán inicialmente con el 10% de las divisas compradas y ese porcentaje irá subiendo de forma gradual hasta llegar al 100%.
La medida la exigió el Fondo Monetario Internacional (FMI) hace más de 10 años.
El BCH espera que el comportamiento de este porcentaje de venta no sea abrupto.
