Le llegó la hora a Reynaldo Clavasquín de confirmar que ya es un técnico de verdad titular, en quien Motagua puede confiar en busca de la copa número 12.
Por experiencia ya carga una semifinal en la espalda. Le tocó soportar el pesado costal de un global 7-2 frente al archirrival Olimpia, dirigido por el mexicano Juan de Dios Cuate Castillo en el Clausura 2007-2008. En esa ocasión dirigió cuatro partidos sustituyendo a Jorge Ernesto Pineda.
Ahora con 40 años de edad, José Reynaldo Clavasquín Bejarano espera repetir la exitosa fórmula que a Motagua le dio un título: en el Clausura 1999-2000, Pepe Treviño salió por los malos resultados y al relevo llegó Luis Alonso Chito Reyes para consagrarse campeón de ese torneo.
Esta vez, Treviño se marchó en la fecha número 14, despachado tras la derrota 2-0 del clásico capitalino y el timón de las águilas pasó a manos de Clavasquín-Amado Guevara, una combinación de “milagroso cambio” sin derrota (2-0 contra Real Sociedad, 4-0 ante Marathón, 1-0 contra Savio, 0-0 frente al Choloma; 4-1 y 3-2 en repechaje contra Real España).
“Tengo un equipo que el domingo saldrá a jugar con personalidad y con una idea clara”, ha dicho firmemente el DT del Ciclón.
Por eso de la “guerra sicológica” sostiene: “Aquí, el juego de palabras no interesa. Lo que importa es que mis jugadores pongan de manifiesto su calidad en la cancha y hacerse más fuertes”.
Es hora de poner a prueba los aprendizajes en sus días de asistente de Ramón Maradiaga, Jaime de la Pava y los últimos entrenadores en Motagua, más Luis Suárez en la Selección Nacional, entre otros.
Por el momento tendrá que enfrentarse al Victoria, con el que se reparte un triunfo en casa por cada lado en el presente torneo.
“Nos enfrentaremos al equipo que tiene mejor ataque. Es muy decidido a atacar y debemos ver cómo contrarrestar su juego”, expresó Clavasquín.
La clave para ganar el boleto a la final está en anotar. “En esta nueva fase tenemos que ser contundentes porque no cerramos de local. Independientemente del resultado, todo se define en el terreno del Victoria y hay que dar un golpe de autoridad aquí. Quiero entrega, lucha y perseverancia del equipo”.
De acuerdo con Reynaldo, hay una desventaja para los jaibos. “La dificultad por ese período de espera te aleja un poco de la competencia. No sé hasta dónde los puede afectar”.
