Mario Martínez luce tranquilo, sereno, concentrado, pero muy consciente de que le queda mucho trabajo por hacer para estar en su mejor nivel en la Selección de Honduras. Si bien se enfoca en lo colectivo y prefiere no hablar de su futuro, afirma estar listo para afrontar de la mejor manera el mundial de Brasil 2014.
Aunque le encantaría jugar en España o Inglaterra, afirma que si una oferta económica de otro país le seduce, la tomará pues tiene una familia a la cual mantener.
¿Qué es de tu futuro?
Al final el último que se da cuenta de un fichaje soy yo, estoy concentrado en la Selección, en lo que puedo hacer en el mundial. El futuro de mi carrera lo decidirá la directiva de Real España.
¿Cuándo se sabrá dónde jugarás?
Sería una falta de respeto hablar de un posible traspaso estando en la Selección Nacional, obviamente hay ofertas, pero no solo yo, sino todos los jugadores del equipo. Estamos a pocos días del mundial y esta Selección es querida y muchos la estarán siguiendo. La directiva tiene que tener calma y no desesperarse igual que yo.
¿Dónde te gustaría jugar?
Inglaterra, Italia, España, pero en esto del fútbol uno no decide, si a mí la directiva de Real España me manda a China o Australia, me tengo que sentir bien, siempre y cuando me vaya bien en la parte económica. Si me parece una propuesta me voy.
Muchos dirán que preferís el dinero a un proyecto deportivo.
La gente tiene que entender eso, uno vive de esto, la carrera del futbolista es corta, hay una familia que depende de uno.
¿El mundial qué significado tiene para tu persona?
Es una gran oportunidad, la que cualquiera desearía tener. Desde pequeño soñé con jugar un mundial a nivel adulto, ahora ese sueño lo estoy cumpliendo. Daré todo por la Selección, tenemos hambre de hacer historia y hacer felices a todos los hondureños.
¿Te gustaría reencontrarte con Brasil en el mundial después de lo que pasó en los Juegos Olímpicos?
Obviamente a uno le motiva jugar contra ese tipo de selecciones, son potencias. La idea de nosotros es pasar a la siguiente ronda e ir avanzando poco a poco. Para hacer historia tenemos que enfrentarnos a los mejores y si es Brasil, bienvenido sea. Sería lindo.
¿Cómo crees que llegará el equipo?
Bien, nos estamos preparando de la mejor manera. Los amistosos nos ayudarán a tomar un poco de ritmo para estar en óptimas condiciones para el debut.
¿Hay presión extra por mejorar la imagen dejada en Sudáfrica 2010?
Claro, como equipo queremos hacer historia y mejorar no solo lo hecho en Sudáfrica, sino también en 1982. Sabemos que no será nada fácil, pero la mentalidad es luchar por llegar lo más lejos que se pueda.
¿Si se pierden todos los amistosos habrá alarma en el equipo?
No, los amistosos nos sirven para aprender de los errores y saber qué es lo que tenemos que mejorar para que las mismas fallas no se cometan en el mundial. Alarma no creo, si ya en competencia perdemos y no jugamos bien, las críticas tendrán todo el sentido y razón de existir.
¿Te apasiona la administración de empresas, a eso te hubieras dedicado?
Me gustan los negocios, soy una persona que sabe lo que quiere, entiendo que por ahora estoy en esto del fútbol, pero tengo claro que de esto no se vive toda la vida. Yo quiero poner mi negocio, luchar por mis cosas. No todo el tiempo tendré un buen sueldo, lo que tengo ahora debo aprovecharlo para pensar en el futuro de mis hijos y de toda mi familia.
¿Qué tipo de negocios te gustaría poner?
He hablado con mi esposa de construir apartamentos, comprar lotes y casa para alquilar o vender, ese es un buen negocio. Hay que pensarlo bien, si tengo el dinero para invertirlo, lo haré de la mejor manera.
¿Eres bueno para los números?
Normal, pienso yo que sí. Pero en esto de mis planes a futuro mi esposa me acompaña. Mis padres me aconsejan.
¿Qué les dirías a tus hijos si los tuvieras enfrente?
Que todo lo que hago es por ellos, las bendiciones que he recibido es gracias a Dios, a mis hijos y al resto de la familia. Mi primer bebé me hizo madurar mucho. Cuando me han criticado duro o no he estado en mi mejor nivel, mis retoños me dan fuerzas para seguir adelante. Yo en el mundial pelearé por la comida de mis hijos, aunque me sienta cansado, todo eso se me olvida cuando pienso en ellos.