Roger Federer, ganador de 17 títulos de Grand Slam, soñó en su infancia con ser futbolista. En una reciente exhibición de fútbol-tenis con Juan Martín del Potro, en Buenos Aires, el suizo dio claras muestras de que hay talento y sensibilidad no solo en su brazo, sino también en sus pies.
Pero un tenista exitoso, tal vez el mejor de todos los tiempos, tiene una desventaja para Federer: está condenado a ver el Mundial por TV porque la cita coincide con uno de los momentos claves de la temporada (Roland Garros).
'Me habría gustado estar ahí (en Brasil), pero no puedo. ¡Ojalá algún día pueda ir a un Mundial!', dijo el suizo, quien desmenuzó lo que espera de la Copa del Mundo 2014.
El siete veces campeón de Wimbledon tiene bien estudiado el Grupo E, que Suiza comparte con Ecuador, Honduras y Francia en el Mundial, aunque admite su desconocimiento acerca de dos de los rivales de los helvéticos.
'Honduras y Ecuador son países que realmente no conocemos en Suiza. Pero sí conozco a (Antonio) Valencia, del Manchester United, y a la mayoría de los jugadores franceses. Creo que es un grupo interesante, cualquiera puede pasar', anticipa Federer.
'El problema con el formato del Mundial es que juegas tres partidos, no tienes margen de error y necesitas un buen inicio. Hay que ser conservador en algún momento, pero debes salir a ganar partidos si quieres hacer un buen papel en el Mundial. No puedes ir siempre a lo seguro', analiza.
Suiza, que debutará ante Ecuador el 15 de junio, es una selección multicultural y de buen juego, es vista por muchos expertos como una de las posibles revelaciones del Mundial, junto a Bélgica. Federer coincide: 'Nuestro grupo tiene una buena mezcla de jugadores experimentados y también jóvenes que tienen muchas ganas de hacer un buen Mundial. Tenemos un gran entrenador en Ottmar Hitzfeld. Realmente creo que podemos hacer algo en este Mundial, junto con Bélgica. Voy a estar apoyando a Suiza todo el tiempo', indica.
Y aunque el suizo seguirá los partidos por televisión, lo hará con una ventaja: tras la gira que hizo a fines del 2012 por Argentina, Brasil y Colombia, tiene una idea clara del ambiente que se vivirá en el Mundial.
'Entiendo, hasta cierto punto, lo que el fútbol significa en Sudamérica. Sé que son apasionados por todos los deportes, pero especialmente por el fútbol. Deben sentirse en el séptimo cielo teniendo el Mundial en casa'.
Según el tenista de 32 años, nacido en Basilea, entre las ventajas de ser uno de los reyes del deporte blanco destaca la de 'hacer avisos e interactuar con otros grandes del deporte, como Lionel Messi'.
'Amo ver jugar al argentino Lionel Messi, es uno de los mejores de este deporte (fútbol), en especial de los últimos 10 o 20 años. También me gustaba el francés (Zinedine) Zidane', agregó.
En la primera ronda en París Roger Federer ya tiene rival en el torneo de Roland Garros, que comenzará mañana. El suizo enfrentará sobre arcilla, en la fase inicial, al tenista eslovaco Lukas Lako.