Santa Rosa de Copán, Honduras.
“Sabemos que ocurrió algo en la derrota del Deportes Savio contra Marathón, pero no podemos probarlo”. Son las temerarias declaraciones del presidente del conjunto copaneco, Bernardo Alvarado, que pese a la pérdida, asegura que no será su equipo el que vaya a parar a la segunda división.
“Nosotros nos vamos a salvar, pero va a ser hasta el final, y lo que nosotros no queríamos es llegar a estas instancias”, explicó Alvarado.
El jerarca de los totoposteros volvió a poner el dedo en el renglón al acusar a varios jugadores de no haber presentado su mejor rendimiento el domingo frente a Marathón, lo que ya había advertido antes del encuentro.
“Estamos investigando algunas acciones porque creemos que Marathón nos estaba tocando algunos jugadores por ahí, lamentablemente no tenemos pruebas; pero si logramos vincular a alguien con una venta es para despedirlo”, sostuvo.
Alvarado comentó que sus sospechas crecieron después de que algunos futbolistas del Savio (no quiso dar nombres) se pusieron a celebrar con Luis Ramírez, exjugador del Savio, el triunfo verdolaga, por lo que les llamó la atención. “Yo les tuve que llamar la atención porque no es posible que estuvieran celebrando con el Bombero la derrota del equipo”.
El mandamás del club copaneco insistió en que no podía dar nombres, pero que sí notó un rendimiento extraño en “jugadores claves” del equipo.
Dijo que le preocupa que suceda lo mismo en los tres encuentros que les queda por disputar. “Sí, claro que me preocupa porque antes dependíamos de que Marathón y Vida no sumaran, y ahora somos nosotros los que no sumamos, como si hubiera alguien interesado en que no sumemos”.
Habló de Mauro Reyes
Alvarado se contradijo al manifestar que desde la fecha 13 del torneo anterior ha visto una baja en el equipo, donde solo hicieron tres puntos de los últimos cinco partidos. Fue donde salió a relucir el nombre del despedido técnico Mauro Reyes.
“Si Mauro Reyes no hubiera regalado ese partido que perdimos 3-0 contra Victoria, no estuviéramos en esa situación”, aseguró.
Al pedirle que fuera más explícito, aclaró que en ese partido el extécnico totopostero dejó al equipo titular y decidió viajar a La Ceiba con suplentes, sin habérselo consultado a él.
Justificó el despido de Reyes aduciendo que les entregó el equipo en el último lugar, ya que no estaba sumando, puesto que de 11 partidos solo hizo siete puntos.
También cuestionó el hecho de que haber llegado a semifinales en el Apertura terminó perjudicando al equipo, ya que “nos dejó debilitados y con una pretemporada corta, llegamos a semifinales, pero estábamos a un punto de los candidatos del descenso porque Marathón realmente no era candidato a descenso”.
Siguió diciendo que “le di la potestad a Mauro Reyes y a Wendy Guerra (copresidenta del club) de contratar a los jugadores para el torneo Clausura y ellos se encargaron de correr a Francisco Herrera, que es mi amigo, pero ahora vela por los intereses de Marathón”.
Cuestionó que Reyes “nunca pudo conseguir el reemplazo del Bombero Ramírez. Trajo al Comayagua López con 270 libras de peso y nos trajo a ocho jugadores que la verdad no nos han producido nada, nos dejó con mal plantel y aparte de todo dejó una división en el equipo”, concluyó Alvarado.
