Los selacios respiran y las águilas se sumergen en las profundidades del torneo Apertura, metidas en un atolladero del que no pueden salir.
La moral ya muy pisoteada del campeón no le permitió una vez más ver la luz. Falló, falló y volvió a fallar frente al arco.
Platense tuvo menos oportunidades, pero acertó una y con el 1-0 fue suficiente para, al fin, reencontrarse con el triunfo.
Se enfrentaban los dos coleros del torneo Apertura, pero la necesidad más imperiosa era para los de Pepe Treviño, por muchas razones, entre ellas, estar últimos en la tabla y ser los actuales campeones del fútbol hondureño. A ello le podríamos agregar que en la Liga de Campeones no lograron siquiera un punto en todo el torneo.
Era por adelantado que, a pesar de ser visitantes, irían al puerto con toda la intención de sumar los tres puntos.
Platense, como equipo de casa, tampoco podía quedarse de brazos cruzados. Siendo penúltimo en la tabla haría cualquier cosa con tal de no perder y quedar en la posición de su rival.
El conjunto capitalino llevaba la voz cantante. Guerrero a los 3 minutos cruzó un disparo que resolvió bien el golero platensista José Mendoza, enviando al tiro de esquina.
Después, Mendoza ahogó el grito de gol de los aficionados azules cuando atoró a Bengtson con el disparo en el área.
A medida que transcurría el partido, los pasos se agigantaban más y más sobre la cabaña porteña. “Tatín” Morán, luego de una pared, tardó décimas de segundo para recibir y anotar lo que pudo haber sido el 1-0.
Más tarde, el mismo Morán, uno de los más participativos del partido, la tuvo más cerca con un cabezazo que pasó besando el ángulo superior izquierdo del arco platensista.
Los selacios comprendieron que no podían dejarle la iniciativa a Motagua y empezaron a hacer jugadas como la de Alexander Aguilar, que en un pase filtrado trastabilló y, aunque superó al golero Kerpo de León, se quedó sin ángulo para anotar el gol. Aguilar casi volvió a marcar de cabeza, pero no supo definir.
El primer tiempo se fue en blanco, pero los aficionados tenían la esperanza de que los goles llegarían en la segunda parte.
A los 60 minutos hubo un milagro en el arco porteño: Júnior Padilla, casi en el área chica, le pegó bajo y potente, pero Mendoza apareció como un felino y con su pierna evitó el gol.
Motagua los buscaba más, pero el que encontró el gol fue Platense. Ocurrió en el minuto 75. El novato Jerry Díaz tenía apenas un par de minutos de haber sustituido a Scott y, en una serie de rebotes en el área, el espigado jugador alcanzó a meter un puntazo para batir a Kerpo de León.
Motagua se revolvió, buscó el gol del empate y esto les costó a los selacios quedar con nueve jugadores en el campo.
Poco tiempo le quedaba al conjunto capitalino para cambiar la situación y, al final, Platense se replegó bien, se salió con la suya y Motagua sigue penando en el campeonato.
FICHA TÉCNICA:
PLATENSE: José Mendoza, Nahúm Solís, Berny Peña, Hendry Córdoba, Francisco Díaz, David Meza, Jorge Cardona, Ian Osorio (Nahúm Ávila, min.78), Alexander Aguilar, Eddie Hernández y Elvis Scott (Jerry Díaz, min.73).
Entrenador: Roque Alfaro.
MOTAGUA: Kerpo de León, Júnior Izaguirre, Odis Borjas, Johnny Leverón, Iván Guerrero, David Molina, Júnior Padilla (J. Norales, min.78), Esdras Padilla (Adán Ramírez, min.54), Carlos Morán (Mario Girón, min.75), Ronald Martínez y Jerry Bengtson.
Entrenador: José Treviño.
