Houston, Texas.
Muchos hondureños recuerdan al costarricense Kendall Waston como “el hombre que nos dejó fuera del Mundial de Rusia 2018” con el gol que le marcó a la Selección de Honduras en la penúltima jornada de la eliminatoria en Concacaf, pero para el defensa del Vancouver Whitecaps, ese representa un momento de gloria personal tras haberse quedado a las puertas de Brasil 2014 por decisión de Jorge Luis Pinto, el entonces técnico de la Tricolor.
Aquel potente cabezazo en tiempo agregado (min 95) durante el juego contra Honduras (que lo ganaba con anotación de Eddie Hernández, al 66) en el estadio Nacional de San José fulminó las aspiraciones de los catrachos y representó la clasificación de los locales a la justa que comenzará en junio próximo.
“Para Honduras voy a quedar como el malo, pero para Costa Rica como algo positivo (risas). Muchos armaron polémica de que yo tenía algo personal contra Pinto. Son situaciones del fútbol, nos tocó celebrar, aunque muchas veces nos ha tocado sufrir. Por ejemplo, cuando perdimos contra Estados Unidos y quedamos fuera de Sudáfrica en 2010 (irónicamente el gol de Jonathan Bornstein que clasificó a la H a esa justa).
La Torre tica, exjugador del Nacional (Uruguay), Saprissa y Peréz Zeledón asegura que la polémica con el entrenador colombiano simplemente no existió. “Yo sé que la prensa en Costa Rica lo hizo para vender, si no hay picante qué se va a vender, por allí va el asunto. Pero si yo veo al profesor Pinto en la calle lo saludo y le doy un abrazo”.
__No quedó mal esa relación a pesar de lo que pasó antes del Mundial de Brasil...
No, yo trato de ser respetuosos con mis jefes y con las decisiones que toman, aunque me gusten o no. Me propuse en mi mente agarrarme de eso para mantener una mentalidad positiva y tener una revancha personal para no volver a sufrir lo que sufrí cuando quedé fuera de la convocatoria para Brasil.
Y vaya que ha conseguido su revancha: actualmente está consolidado en la zaga del conjunto canadiense (al que llegó en 2014) y en el equipo de su país, con el que podrá cristalizar su sueño de jugar un mundial mayor, si Óscar “Machillo” Ramírez se lo permite. Eso sí, Kendall reconoce que el mayor reto será honrar la actuación que hizo su selección en suelo brasileño.
“Tenemos ese techo, ese estatus que la gente quiere mantener. Tenemos una gran responsabilidad, mínimo llegar allí o superarlo”, dice.
Rival en la cancha; amigo fuera de ella. Pocos saben que el tico comenzó una amistad con el delantero hondureño Romell Quioto, después de que el de Balfate sufrió una lesión en el pulmón izquierdo (durante un juego por la Concachampions entre Olimpia y los Whitecaps) y que lo mantuvo en suelo canadiense por varias semanas.
“Allí tuvimos mucho tiempo para conversar y convivir. Obviamente en los partidos de Costa Rica contra Honduras nos veíamos y nos saludamos. La verdad que es una persona a la que quiero mucho”, asegura el espigado zaguero de 30 años.
Pudimos ver lo bien que se llevan tras el encuentro en el que los Caps vencieron a domicilio 2-1 al Houston Dynamo en el BBVA Compass Stadium de Houston. El exmundialista Sub-17 en Perú 2005 y en el Sub-20 en Canadá 2007, habló sobre la evolución que han tenido tanto Quioto como Alberth Elis.
“Son tremendos. Si usted ve lo que ellos han logrado desde que estaban en Olimpia hasta ahora ha sido muy bueno, muy positivo. Eso le ayuda a otros jugadores hondureños para que vengan a la MLS o a otros países”, comenta.
__Elis le rompe la cabeza a cualquier defensa...
Sí, yo estoy con dolor de cabeza ahorita (sonríe). La velocidad y el enganche que tiene, es un jugador bueno, ojalá que siga en ese crecimiento.
__¿Cuál es el jugador hondureño más difícil de marcar?
Elis y Quioto porque son los que más he enfrentado. Yo por mi estatura no soy un jugador tan rápido, entonces tengo que estar leyendo bien los movimientos que van a hacer para no quedarme tan rezagado.
__Aunque Honduras no estará en Rusia 2018, ¿cómo se le ve como rival?
Es una selección que siempre nos complica, es el clásico centroamericano. Son partidos que no son fáciles, que uno no ve como un 3-0. Y como país, cuando fui a San Pedro Sula, me encantó, especialmente el baile punta.
Antes de terminar la conversación, le pedimos su opinión sobre Amado Guevara y Carlos Pavón, dos referentes que bien podrían tomar las riendas de la Bicolor.
“Ay Amado, no lo enfrenté, pero siempre lo seguí cuando estuvo en Saprissa, es un crack, de esos jugadores que no ves siempre. La calidad que tenía para pegarle a la pelota, tenía una clase, me gustaba verlo. Ojalá que salgan más jugadores así. Pavón me hacía sufrir cuando era pequeño, siempre me ponía a llorar en la casa con los goles que nos hacía. Me imagino que para Honduras esos jugadores emblemáticos pueden llegar a unir al pueblo y convencer a los jugadores de la filosofía que llevan”.
