Distrito Federal, México.
Miguel Herrera quiere el botín completo: eliminatoria, contundencia y su propia confirmación como técnico del Tri para Brasil 2014, porque, asevera, 'México va al Mundial y yo espero ir con él, pero México, seguro va'.
El Piojo juramenta la victoria en el Estadio Azteca este miércoles ante Nueva Zelanda, y agrega en su promesa la presencia de México en Brasil 2014, y hasta le alcanza el optimismo para decirle a un reportero de Nueva Zelanda que si clasifica y los dueños de equipos lo eligen el 2 de diciembre, 'me verán hasta el Mundial 2018'.
Miguel Herrera reconoce el escenario que rodea al Tri emergente. Heredó una situación dramática. Vencer o morir. Y 180 minutos sin tregua, sin plazos. Pero, en medio de ese atosigamiento ambiental de este juego, el Piojo les pide no perder la esencia: el placer por el juego mismo.
'Que no se olviden que es un juego, pero que también hay la responsabilidad de llevar a México al Mundial, pero especialmente que no se olviden que este es un juego'.
Y hay un principio de la doctrina de esta selección emergente, y la describe así Herrera: 'Ellos saben los lineamientos. Prohibido caminar. Prohibido estar parados, Cuando tenemos la pelota hay que ser ayuda, una opción para salir con ella al ataque, y por otra parte si no la tenemos, ayudar todos a recuperarla'.
EN BUSCA DEL PERFECCIONISMO
Reitera que al compromiso de ganar le agrega otros valores: ser contundentes, ofensivos, agradables, espectaculares. 'Lo importante será saber encontrar el primer gol, pero sin descuidos, sin desatenciones, y con ese gol, poder abrir el juego y ampliar el marcador'.
Porque Herrera sabe que la ventaja del Azteca debe explotarla, pese a que ha sido más una flaqueza que una fortaleza en esta eliminatoria mundialista.
'Estoy seguro que vamos a ganar (este miércoles). Estoy seguro que México irá al Mundial y espero ir con él. Y espero que podamos finiquitar la eliminatoria en el Azteca, con una vetaja de tres goles sería un buen respaldo para viajar a Nueva Zelanda, pero buscaremos más, y ojo, buscaremos ganar allá también', indicó.
A lo que no se compromete es un escándalo en el marcador. 'Las goleadas son accidentes. Sabemos que va a ser un partido disputado, pero estamos seguros que vamos a ganar'.
Y al hablar de esa pretensión de perfeccionismo de ganar, gustar y golear, Miguel Herrera rechaza que alguien obnubilado lo compare con apegarse al estilo del Barcelona.
'No comparo a México con nadie. Vamos a jugar muy bien. Quieren demostrarle a su gente que están listos muy bien, para responder a la responsabilidad que les asignaron. Vamos a ser muy rápidos, muy intensos y dinámicos'.
LOS ATAJOS A NUEVA ZELANDA
Incluso, asevera que en el trabajo táctico no sólo atendieron el juego aéreo como metodología de defensa, sino también para intentar hacer daño.
'Hemos trabajado el juego áreo, no sólo para contrarrestarlos, sino para ser capaces de hacerles daño. Tenemos futbolistas con mucha altura y bien remate de cabeza y vamos a aprovecharlos'.
'Y también hemos trabajado para estar preparados para mantenr a los atacantes lejos del área, tratar de nulificar su primera jugada, y si ejecuta la primera, entonces tratar de nulificar la segunda jugada, impedir el disparo o el pase. Conocemos bien a Nueva Zelanda, lo hemos estudiado y esperamos anularlos, pero no será fácil. En ningún momento hay menosprecio', puntualiza.
Por último Herrera fue consultado si se le hará un ambiente hostil a Nueva Zelanda como cuando México viaja a jugar a Centroamérica. 'A ellos (Nueva Zelanda) nos gustaría llevárnoslos a El Salvador o a Honduras para que vean lo que es realmente un país hostil'.
