San Pedro Sula, Honduras.
Un goleador siempre se echa de menos dentro de una cancha de fútbol. Para Carlo Costly, esa distancia que se ha prolongado por varios meses está prácticamente a dos semanas de terminar.
El delantero catracho, mundialista en Brasil 2014, se encuentra entrenando con Real España, equipo que pretende convencer al “Cocherito” de que se quede. Sin embargo, la prioridad del exjugador de clubes como Atlas, Vaslui, Birmingham y Gaziantepspor es seguir siendo legionario.
Costly nos atendió ayer en el campamento de la Máquina tras la primera práctica matutina, contó sus planes a corto plazo, aclaró rumores de “retiro” y nos dijo si piensa volver a la Selección.
“Estoy tratando de ponerme en forma, lo poco que queda porque siempre he estado entrenando antes de venir aquí. Trato de meterme más futbolísticamente y estar mejor que antes”, dijo.
Costly es de los que llevan el fútbol en las venas, por eso hacer los botines a un lado le recuerda que “todos los que juegan fútbol profesional lo extrañan. Es lo mejor para cada futbolista y en mi caso no es excepción. Se extraña y por eso estoy aquí”.
¿He escuchado un rumor que dice que ha pensado retirarse?
“¿Retirarme? No, si me voy a retirar a los 40 años. Para nada. Todavía tengo mucho que dar y espero aportar mi granito de arena en caso de quedarme aquí (Real España)”.
Selección Nacional. Quizá apreté mucho el acelerador en la entrevista o toqué un tema del cual tiene poco de que hablar.
Hay gente que te extraña en la Selección, le comenté.
“¿Me extrañan? No, para nada. En la Selección, como lo dije en el Mundial de Brasil (2014), vuelvo hasta que esté en buenas condiciones o quizá no regrese porque creo que los jugadores que hay lo están haciendo de la mejor manera. Esperemos que les vaya bien”.
Y sigue: “Ahorita no me interesa la Selección. De hecho ni los veo ni nada porque no me interesa. Me importan más los proyectos que he estado haciendo por fuera; despejarme del fútbol estos meses que pasé fuera. Ahora a dedicarme a Real España si me llego a quedar y darle todo”.
Quedarse acá ¿de qué dependerá?, insistí.
“Como lo hablé con algunos dirigentes, tengo las puertas abiertas en unos clubes de Grecia, China... ¿Turquía? No. ¿Chipre? Hay posibilidades, pero la más abierta puede que sea China o Grecia. Dependerá de la rapidez con que se muevan mis representantes para definir dentro de 15 días”.
Ayudar a la Máquina.
El atacante buscó en su memoria y encontró el recuerdo de la primera impresión que tuvo del técnico Mario Zanabria.
“Lo conozco desde la primera vez que vine a entrenar con Real España, creo que fue después de 2010. Es un tipo muy trabajador, muy buena gente, esperamos darle muchas alegrías al club”.
¿Le pide que se quede?
“No es asunto de él. Sabe que la dirigencia se mueve en las contrataciones y con él hablamos en la cancha sobre lo que vamos a hacer”.
Otra duda me quedaba por saldar. Muchos quieren saber sobre usted. ¿Por qué el silencio?
“Me gusta pasar desapercibido. No me gusta llamar la atención de nadie y eso se lo he inculcado a mi familia, más que todo. Sabemos que realmente no soy nadie”.
Antes de despedirme porque el ariete debe descansar para la segunda tanda del día, persisto en conocer cuándo definirá su futuro. ¿Quince días?
“Ojalá sí. Eso se lo dejé claro a mis representantes. No me puedo quedar otros seis meses sin jugar. Entonces, si no sale nada en el extranjero, Asia, pues con todo el gusto del mundo firmaría con Real España”.
