Julio César de León declaró en Diez Radio que no se viste más con la camiseta del Platense ya que hubo situaciones que sobrepasaron el límite y confirma que le seduce jugar en la MLS, una liga que siempre le ha pretendido.
El mediocampista confiesa que tiene objetivos personales que cumplir y no descarta jugar en otro equipo de Honduras que necesite de sus servicios.
¿Cuándo te presentas a la pretemporada del Platense que ya inició?
Con el equipo no voy a iniciar pretemporada, no sigo más en Platense, hay ciertas cosas que lastimosamente sobrepasaron el límite y he decidido tratar de emigrar para otra parte.
¿Porqué te vas del Platense?
Mis pretensiones son otras y tengo mucho que dar individualmente, sobre todo con la experiencia que he dado y se que puedo ir aprendiendo día con día. Gracias a Dios estoy tranquilo y solo pienso en estar físicamente bien.
¿Es por la llegada del Tato Ortiz que no seguirás?
No tiene nada que ver, son cosas personales mías y los objetivos que tengo son buenos y pretenciosos, soy una persona ambicioso y quiero ganar cada día las mejores cosas en la vida personal y dar lo mejor de mí y lastimosamente en Platense no pude dar eso porque aquí hay cosas... Ahora voy a seguir al Tiburón como aficionado.
¿Hubo rumores de jugadores del plantel que no estaban contentos con tu actitud. ¿Tuviste problemas?
Nada que ver con eso, incomprensibles siempre van a existir, lo importante es que no se pase a más. Bueno, si no les gustaba la forma ambiciosa que tengo yo, nunca vamos a estar de acuerdo y si les gusta el inconformismo, yo no puedo ni dormir con gente que sea conformista, no puedo ni comer a la par de ellos, puedo tolelarlas pero no compartir el mismo bocado, lo siento mucho por ellos porque mi bocado es sagrado y me lo gano con sangre no quedando bien con otros.
Nunca intercedí en decisiones técnicas ni futbolísticas, soy una persona que me gusta observar y he aprendido a tragármelas, en silencio pero por el bien del equipo, pero si tengo límites, pero no puedo convivir con esas personas, no tengo esa mentalidad conformista que tiene el hondureña.