Nos alejamos de la rutina y caemos en las garras de la desconexión, o al menos lo intentamos. Con la época de vacaciones y verano aspiramos a que todo se nos haga placentero. Y, cuando se trata del terreno afectivo, es mucho más difícil ocultarlo.
Susana Cañellas es psicóloga sexual y directora del departamento de Psicología Clínica en el Centro de Salud Sexual de la Clínica Rotger de Palma de Mallorca. EFE profundiza en este tema con su ayuda.
Tanto las estadísticas, como un estudio reciente con 29.000 personas de 35 países diferentes, concluyen que las relaciones sexuales aumentan en las épocas cálidas. Otro dato, bastante contrastado, es que al final del periodo vacacional, se dan más conflictos entre las parejas y sube el índice de separaciones.
Según la experta, los factores que influyen en el aumento del deseo sexual en verano son:
Factor biológico: las altas temperaturas hacen que suba el nivel de testosterona, melatonina y endorfinas.
Factor psicológico: la época veraniega nos llena de tiempo libre, por lo que la actitud y la predisposición de la persona cambian.
Factor sociocultural: “en verano, la gente está más en la calle, se relaciona más, cambia de ambiente, con lo cual hay más posibilidad de conocer gente nueva”, explica la doctora.
