Hoy, Harry Styles y Timothée Chalamet utilizan vestidos vaporosos, se maquillan y se pintan las uñas de coloridos tonos, así que no es de extrañar que las corbatas, esos pedacitos de tela que los hombres utilizaban para adornarse antes de la pandemia, hayan regresado de múltiples formas, pero ahora para el clóset de las chicas.
Las corbatas para ellas aparecen delgadas o gruesas, en materiales que van desde la lana hasta el tweed, pasando por los tejidos sintéticos y los metálicos para ayudar a reforzar la figura de la mujer en estos tiempos.
Además, este accesorio se presenta más versátil que nunca, ya que se aposenta en los cuellos también en forma del clásico moño de smoking o acompañado de vuelos u holanes en el cuello para mostrar un toque más romántico en “looks” inspirados en George Sand, la escritora del siglo 19 que se hizo famosa por vestirse como todo un caballero.
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Combina con un traje negro y camisa blanca, con una camiseta y chamarra tipo “bomber” o con un chaleco, las corbatas hoy se adaptan al modo de vida de las mujeres y les otorgan poder.
Este sencillo accesorio también se ha visto en firmas como Dior, Vuitton, Celine y Hermès.
Y ojo, también se llevan con “looks” que comprendan el efecto de “layering”, es decir, de prenda sobre prenda, para lograr todavía más presencia y poder.
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