Redacción.
Son ricos, buenos para la salud y potencialmente placenteros... ah, y hasta pueden ayudarle a quemar calorías y quitarle alguno que otro achaque, por eso no pueden faltar en San Valentín.
Estas son algunas razones por las que no debe dejar de utilizar esta deliciosa expresión de amor.
1. El primer beso es de los mejores recuerdos
La edad promedio en la que una persona da su primer beso es a los 15 años.
Sheril Kirshenbaum, profesora de la Universidad de Texas, afirma que es una de las experiencias más recordadas en la vida de cada persona, incluso más que la primera relación sexual.
En este sentido, un estudio indica que las personas recuerdan con precisión de 90% de lo que ocurrió en sus primeros besos más que en la primera relación sexual.
2. Determina si dos personas deben o no iniciar una relación
Encuestas señalan que 66% de las mujeres y 59% de los hombres no empezaron una relación romántica por el desencanto del primer beso.
Lo normal es que al besar se libere dopamina, un neurotransmisor que genera el deseo de estar con la persona a la que se besa y una sensación de ingravidez.
Durante el beso se produce una mezcla bioquímica que lleva a las personas a un estado de conciencia alterado.
3. Su salud resulta beneficiada
Besar libera las siguientes hormonas:
- Adrenalina y noradrenalina: aceleran el ritmo cardíaco; hacen a la persona sentirse estimulada.
- Oxitocina: provoca una fuerte sensación de apego y de unión duradera con la pareja; se asocia con el cariño y la ternura.
- Testosterona: aumenta el deseo y las ganas de besar más.
Sépalo
Freud decía que la boca es la parte más sensible de todo el organismo humano y el contacto de dos labios es una forma de sensibilidad y una manera de pasar afecto.
Los países nórdicos son más fríos, y el beso sale sobrando, nada más lo dejan para la intimidad.
Más beneficios
Aumenta la temperatura y esto mejora la circulación del cuerpo. Libera mediadores químicos que inducen a un estado de tranquilidad.
Las endorfinas que libera combaten la depresión, angustia, desánimo, tristeza o aflicción. Mientras más apasionado sea, más endorfinas se liberan.
Las personas que dan y reciben besos apasionados tienen menor probabilidad de sufrir desórdenes neurológicos como alexitimia.
De acuerdo con la doctora María Rojo, la microbiota que se intercambia al besar actúa como estimulador del sistema inmune.
Al besar se queman 15 calorías en unos tres minutos; pues, al final, se activan todos los músculos faciales (34) y más de 130 músculos extras debido a la postura que toma el cuerpo.
Mover los músculos del rostro disminuye la formación de arrugas en la piel, la mejoran sensiblemente y estimulan su regeneración.
En la saliva de dos personas que se besan se transportan bacterias no patógenas, así como algunos que sí pueden afectar al organismo.
