San Pedro Sula, Honduras.
Ser padre de familia no es tarea fácil, y menos cuando ambos progenitores trabajan fuera de casa y no cuentan con tiempo para compartir con los hijos.
Muchas madres optan por quedarse en el hogar al cuidado de los niños; otras necesitan salir a trabajar para apoyar económicamente a su pareja, y algunas trabajan porque les gusta y quieren desarrollarse en el ámbito profesional.
No obstante, la familia es la base de la sociedad y hay que dedicar tiempo tanto a la pareja como a los hijos.
La psicóloga y consejera familiar Rosario Murillo brinda algunas recomendaciones para hacer un balance entre el trabajo y la familia.
“Es necesario tener las prioridades bien claras. Si bien es cierto, el bienestar de la familia depende en gran parte de los ingresos económicos; pero también se debe compartir momentos de calidad con los miembros del hogar”, explica Murillo.
Claves
La especialista aconseja a los padres involucrarse en las actividades de los hijos; por ejemplo, estar pendiente de sus tareas y avances en la escuela.
Recomienda a las madres realizar las labores del hogar con los niños para propiciar la comunicación y compartir tiempo con ellos.
“Un problema es que muchas familias han sustituido el tiempo de familia por el uso de los dispositivos electrónicos, lo cual perjudica la comunicación y rompe el vínculo entre padres e hijos”, detalla la experta.
Explica que muchos progenitores llegan del trabajo tan agotados que se encierran en sus habitaciones y se vuelven “islas” en su propio hogar. “Aunque estén cansados no hay que perder los momentos al lado de los pequeños. Algún día crecerán y lamentarán haber perdido ese tiempo”, concluye.
Ser padre de familia no es tarea fácil, y menos cuando ambos progenitores trabajan fuera de casa y no cuentan con tiempo para compartir con los hijos.
Muchas madres optan por quedarse en el hogar al cuidado de los niños; otras necesitan salir a trabajar para apoyar económicamente a su pareja, y algunas trabajan porque les gusta y quieren desarrollarse en el ámbito profesional.
No obstante, la familia es la base de la sociedad y hay que dedicar tiempo tanto a la pareja como a los hijos.
La psicóloga y consejera familiar Rosario Murillo brinda algunas recomendaciones para hacer un balance entre el trabajo y la familia.
“Es necesario tener las prioridades bien claras. Si bien es cierto, el bienestar de la familia depende en gran parte de los ingresos económicos; pero también se debe compartir momentos de calidad con los miembros del hogar”, explica Murillo.
Claves
La especialista aconseja a los padres involucrarse en las actividades de los hijos; por ejemplo, estar pendiente de sus tareas y avances en la escuela.
Recomienda a las madres realizar las labores del hogar con los niños para propiciar la comunicación y compartir tiempo con ellos.
“Un problema es que muchas familias han sustituido el tiempo de familia por el uso de los dispositivos electrónicos, lo cual perjudica la comunicación y rompe el vínculo entre padres e hijos”, detalla la experta.
Explica que muchos progenitores llegan del trabajo tan agotados que se encierran en sus habitaciones y se vuelven “islas” en su propio hogar. “Aunque estén cansados no hay que perder los momentos al lado de los pequeños. Algún día crecerán y lamentarán haber perdido ese tiempo”, concluye.