Hijos de militares pueden sufrir acosos

Los hijos de militares también son propensos a realizar conductas de riesgo

Estados Unidos.

Los niños procedentes de familias militares estadounidenses son más propensos a realizar conductas de riesgo y a sufrir acoso que los de familias civiles, según un estudio reciente.

Los investigadores encuestaron a aproximadamente 688,000 estudiantes de escuela intermedia y secundaria en California en 2013, incluyendo a más de 54,000 que vivían en una familia militar.

En comparación con los que procedían de familias civiles, los niños de familias militares eran más propensos a reportar el consumo de alcohol (un 45 frente a un 39 por ciento); sufrir acoso físico, como recibir puñetazos, patadas o bofetadas (un 36 frente a un 27 por ciento), y acoso no físico, como ser el blanco de las bromas, rumores y acoso cibernético (un 66 frente a un 59 por ciento).

Conductas peligrosas

El estudio, publicado el 17 de agosto en la revista JAMA Pediatrics, también halló que los niños procedentes de las familias militares eran más propensos a llevar un arma de fuego o un cuchillo a la escuela.

Las peleas y el miedo a ser golpeado también eran más habituales en los niños de familias militares.

'Estos resultados sugieren que un subgrupo considerable de estudiantes relacionados con miembros del ejército están teniendo problemas para afrontar las ramificaciones de dos guerras largas', señaló la autora del estudio, Kathrine Sullivan, estudiante de doctorado en trabajo social en la Universidad de Carolina del Sur, en un comunicado de prensa de la universidad.

'Aunque a muchos niños de padres militares les sigue yendo bien, a pesar de estos factores estresantes, muchos necesitan un mayor respaldo', añadió.

A nivel nacional, se estima que 4 millones de estudiantes han tenido padres en servicio desde que empezaron las guerras en Irak y Afganistán, y muchos de estos jóvenes están en la actualidad matriculados en escuelas públicas, según los investigadores.

Hallazgos

'Los hallazgos sugieren que el riesgo para la salud y los problemas de conducta de los estudiantes relacionados con el ejército no deberían verse como algo aislado', comentó en el comunicado de prensa la coautora del estudio, Tamika Gilreath, profesora asistente de la Facultad de Trabajo Social de la Universidad de Carolina del Sur.

'Probablemente los jóvenes que tengan dificultades con el consumo de sustancias sean los mismos que tengan problemas con la victimización', añadió.

Las escuelas deben saber quiénes son los estudiantes relacionados con veteranos y miembros del ejército, y deberían examinar sus necesidades y proporcionar respaldos, comentó en el comunicado de prensa el coautor del estudio, Gordon Capp, estudiante de doctorado en trabajo social en la Universidad de Carolina del Sur.