Entre más ejercicios, menos infartos

Es importante que practique una actividad física a diario para mantener saludable su corazón.

California, Estados Unidos

Mantener la aptitud física puede ayudar a evitar los problemas del corazón, aunque la genética confiera a una persona un riesgo más alto de arterias obstruidas, encuentra un nuevo estudio de gran tamaño.

Los investigadores observaron a casi 500,000 adultos de mediana edad y mayores, y encontraron que los que tenían unos niveles más altos de aptitud física eran menos propensos a desarrollar enfermedad cardiaca a lo largo de seis años. Esto fue así incluso en las personas que portaban variantes genéticas que aumentan las probabilidades de problemas del corazón.

Eso no significa que el ejercicio borre los efectos de los genes, añadieron los investigadores. Pero si alguien porta una vulnerabilidad genética a la enfermedad cardiaca, le va mejor si tiene una buena aptitud física.

Riesgos

“Es probable que se beneficie si intenta mejorar su aptitud física con el ejercicio”, afirmó el investigador principal, el doctor Erik Ingelsson, profesor de medicina en la Universidad de Stanford, en California.

¿Qué nivel o qué tipo de ejercicio es “suficiente”? El estudio no puede responder a esas preguntas, dijo Ingelsson.

Su equipo no evaluó ningún régimen de ejercicio en particular. Los investigadores evaluaron la forma en que los niveles de aptitud física de las personas, medidos durante el ejercicio realizado en una bicicleta estacionaria, se correlacionaban con el riesgo de desarrollar una enfermedad cardiaca a lo largo de los próximos seis años.

Encontraron que independientemente de los genes que las personas portaran, unos niveles más altos de aptitud física significaban un riesgo más bajo de problemas del corazón.

En el tercio de las personas que portaban el riesgo genético más alto, las que tenían los niveles más altos de aptitud física eran un 49 por ciento menos propensas a desarrollar una enfermedad de la arteria coronaria, frente a las que tenían una peor forma física. Y tenían un 60 por ciento menos de probabilidades de desarrollar fibrilación auricular.

La enfermedad cardiaca coronaria se refiere al endurecimiento y estrechamiento de las arterias del corazón, lo que puede conducir a un ataque cardiaco o a otras complicaciones. La fibrilación auricular es un trastorno común del ritmo cardiaco que aumenta el riesgo de accidente cerebrovascular y de insuficiencia cardiaca.

“Este es un estudio magnífico”, aseguró la doctora Suzanne Steinbaum, cardióloga y vocera de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association), que no participó en el estudio. “El ejercicio de verdad es la mejor medicina”.

El estudio tiene limitaciones, apuntó. No evaluó directamente los efectos del ejercicio. Fue un estudio observacional que siguió los resultados de las personas, así que no prueba causalidad.

A pesar de su predisposición genética, el ejercicio puede ayudarle a evitar males cardíacos

Un estudio en el que participaron 500,000 adultos confirma lo que otras investigaciones han mostrado: que mantener la forma física evita las enfermedades cardiacas.

“Es seguro afirmar que si alguien hace ejercicio con regularidad, es probable que eso se traduzca en una mejora en la supervivencia”, señala experto.

Si se tiene una predisposición genética, el ejercicio puede cambiar los resultados. Sigue estando en manos de la persona, comentan los especialistas.

El ejercicio no tiene que ser complejo ni implicar una membresía en un gimnasio, simplemente hay que estar en movimiento.

No importa qué actividad sea, siempre y cuando se eleve la frecuencia cardiaca. Puede ir al gimnasio, o bailar y hacer saltos en tijera en casa.