El objetivo es establecer una fecha para esta causa, ha sido que los gobiernos y la comunidad internacional lleven a cabo acciones concretas para acabar con la violencia contra la mujer.
Dependiendo de cada país, entre un 25 y 75 % de las mujeres son maltratadas físicamente en su hogar. En Honduras, por ejemplo, cada 16 horas una mujer es asesinada. El Centro de Derecho de Mujeres ha realizado en sus redes sociales una campaña visual de concienciación en base a los reportes policiales recientes.
Datos escalofriantes
Un estudio reciente indica que el 35% de las mujeres ha sido víctima de violencia sexual por parte de un tercero, al menos una vez en su vida.
El 30% de las mujeres que han mantenido una relación de pareja reportaron haber tenido al menos una experiencia de violencia física o sexual por culpa de su pareja.
La violencia de género puede incrementar los problemas de salud de toda índole, principalmente reproductiva. Además eleva la vulnerabilidad a contraer VIH.El 38% de los asesinatos a mujeres son ejecutados por sus parejas.
Consecuencias
Las consecuencias pueden ser a largo o corto plazo y repercuten de manera psicológica, sexual, física y mental. También pueden haber inconvenientes con la salud reproductiva.
El 42% de las afectadas declaró tener marcas como consecuencia de esos momentos de violencia.Puede haber casos fatales de homicidios o suicidios. Lumbalgias, dolores de cabeza, abdominal, desordenes gastrointestinales y fibromialgia son algunas de las consecuencias físicas.En el caso de las mujeres embarazadas, puede propulsar el nacimiento del bebé antes de tiempo o incluso la pérdida de esa vida en camino.
Entre los efectos emocionales, se destacan el estrés postraumático, las dificultades para conciliar el sueño, la depresión, trastornos alimenticios y actitudes suicidas.Las mujeres que han sufrido este tipo de violencia han mostrado tener problemas con el alcohol y ser más propensas a contraer VIH, así como otras enfermedades de transmisión sexual.
 Una de las consecuencias de la violencia intrafamiliar es que incide en la violencia contra los niños también.
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Estas son las premisas con las que, según los expertos, se debe empezar un trabajo de abandono de la violencia.
1. Somos 100 por ciento responsables de nuestra conducta.
2. La violencia no es una solución aceptable de los problemas.
3. No tenemos control sobre ninguna otra persona, pero tenemos control sobre nosotros mismos.
4. Cuando hablamos con los demás, necesitamos decir nuestros sentimientos claramente, sin culpar o amenazar.
5. Entender más sobre lo que nos decimos a nosotros mismos, sobre nuestros síntomas físicos y nuestras emociones, es muy importante para progresar y mejorar.
6. Siempre podemos tomar un tiempo fuera* antes de reaccionar.
7. Nada podemos hacer respecto al pasado, pero podemos cambiar el futuro.
8. Aunque hay diferencias entre hombres y mujeres, nuestros derechos y necesidades son, en el fondo, iguales.
9. Los terapeutas y los facilitadores no pueden hacer que la gente cambie, sólo pueden preparar el terreno para que el cambio ocurra.
*Salirse de casa o del sitio donde se está discutiendo para evitar que se desate la violencia. Denunciar a tiempo el abuso ante las autoridades puede salvar incluso la vida.
Fuente: 'Sin golpes', Christauria Welland y David Wexler. Editorial Pax.
