11 errores que cometemos las mujeres a los 20

Si hoy te preocupa no tener en el futuro un nivel de vida afectivo o financiero deseado, estás siendo víctima de muchas de estas fallas.

Redacción.

No hay ni una sola asignatura desde la educación primaria hasta acabada la universidad que te enseñe a ganar y gestionar de forma inteligente tu dinero. El sitio web Main Street encuestó a varios expertos en finanzas personales para que dieran su opinión de cuáles son los peores errores que las personas cometen en asuntos de dinero. También incluimos las situaciones emocionales y afectivas que se viven a los 20 años. Así que vamos a aprovecharnos de esa sabiduría de personas que ya pasaron por la transición.

1. Se piensa que la educación y el talento son suficientes para tener éxito. Eso es falso, pues hay muchas más personas talentosas y con carreras que han fracasado que gente sin talento y que han logrado tener éxito. Las habilidades sociales son más importantes que todo eso, y es algo que no hay que subestimar, pues la mayoría de buenos trabajos no son publicados en portales de empleo. Son oportunidades laborales que vienen de nuestro círculo. Por tanto, es de vital importancia tener un círculo de conocidos lo más amplio posible.

2. El tiempo perdido. Una de las cosas que nunca podrás recuperar es el tiempo que has perdido. Finalmente, a los 35 años te arrepientes de gran parte de ese tiempo que ha sido como tirado al cubo de la basura. Y el tiempo es muy valioso. De hecho, lo único que tenemos en la vida es tiempo. Si se va el tiempo, no tenemos nada. Por tanto, es algo que nunca hay que perder.

3. No comenzar a ahorrar dinero. Aunque seamos repetitivos en este punto, la diferencia entre comenzar a ahorrar a esta edad y hacerlo más tarde, es enorme para el futuro de nuestras finanzas. Los 20 años son para disfrutar, pero lo son para ahorrar y para aprovechar esa vitalidad y energía que después no tendrás.

4. Igualan la felicidad con el dinero. Si bien no hay nada de malo en hacer trabajos que no nos gustan a edad temprana, el acostumbrarse y quedarte encajado en una empresa únicamente por cobrar un salario a final de mes en lugar de darles forma a tus sueños, es algo que con el paso del tiempo, cualquier persona se arrepiente. “Lo que pude haber hecho y no hice”.

5. Descuidar la salud. Las resacas hacen más daño a tu salud de lo que puedes imaginar, además de que fomentan el alcoholismo y tergiversan el significado de diversión. Mala alimentación, tabaco, drogas y falta de ejercicio producen en el cuerpo un desgaste progresivo que no notamos hasta el día que lo notamos. Como alguien dijo una vez: “Trata a tu cuerpo como si lo fueras a necesitar siempre”.

6. Darse por vencidos cuando las cosas se ponen difíciles. Una relación fallida o un despido hace que muchos jóvenes acaben hundiéndose. A los 20 años muy pocos saben que ese primer gran amor no es el definitivo o que el hecho de que te despidan de un trabajo a veces es una liberación y una excelente oportunidad de avanzar en la vida.

7. El mito del tiempo. Muchos piensan que a los 20 años aún es pronto, y que ya tendrán tiempo de hacer muchas cosas después, por lo que abandonan sus aspiraciones pensando que las podrán retomar después. El caso es que el tiempo, cuando tenemos prisa por lograr algo, pasa a toda velocidad. Y en algún momento tienes 33 años cuando hace poco tiempo tenías 26. Y ya no eres joven. En ese momento estás en una carrera a contrareloj para lograr tus ambiciosos objetivos antes de los 40, y quizá tengas las sensación de que ya es tarde para darle un giro a tu carrera o asumir un enorme riesgo.

8. Las cosas que te hubiera gustado hacer y no hiciste. No es ningún mito el hecho de que las personas se arrepientan mucho más de las cosas que no hicieron que de aquellas que hicieron. Por ejemplo, en el tema amoroso, una persona puede arrepentirse toda la vida por no haber dado el paso a la hora de besar a una chica. Vivirá toda su vida preguntándose... ¿y si...?..

9. Tratar de caerle bien a todo el mundo. Cuando uno se incorpora al mundo laboral puede ser algo normal el querer caerle bien al capullo de tu compañero de trabajo, a un mal jefe y a esas personas a las que no les gustas. Con la edad aprendes que no puedes caerle bien a todo el mundo. De hecho, sería muy mala señal. Y lo peor que puedes hacer es dedicarte a gastar energía intentando llevarte bien con personas a las que no le caes bien. Llega a ser estresante.

10. Pensar que todas las amistades durarán siempre. Puedes llegar a pensar que conservarás a todos tus amigos, pero lo cierto es que los caminos más adelante toman rumbos muy distintos. De hecho, muchos de tus amigos tomarán otros caminos y otros únicamente te traerán problemas. De hecho, a veces perdemos la oportunidad de conocer gente muy interesante por conservar esas estropeadas amistades.

11. Enamorarse de alguien que no está enamorado de ti. Supongo que a todos nos ha pasado. Y con el tiempo descubres lo idiota que fuiste por el hecho de enamorarte de alguien que ni siquiera te miraba. Descubres que eso no es amor, sino “encaprichamiento”, pues es imposible que te enamores de alguien que no te da muestras de cariño.

Para no olvidar

Nunca abandones futuros proyectos porque los anteriores no te han salido bien. Recuerda que la vida es un campo de juego. Y en el campo de juego hay que luchar y jamás abandonar. Solo así se gana, cuando has dado lo mejor de ti misma antes de que suene el pitazo final.