Tegucigalpa, Honduras.
La Fiscalía de la Mujer formalizó una solicitud al Congreso para que se endurezca el castigo a quienes incurran en el delito de violencia intrafamiliar.
La petición se remitió en las últimas horas a la comisión de familia, niñez y juventud del Congreso para que se reforme el artículo 179-A y 179-B del Código Penal.
El delito de violencia intrafamiliar es una de las que mayor se denuncia en el Ministerio Público, en los que se consignan como víctimas las esposas o compañeras de hogar, hijos, entre otros miembros de la familia. “La Fiscalía ha presentado un proyecto de reforma del artículo de violencia intrafamiliar, porque hemos contemplado varias causas”, informó la fiscal especial de la Mujer, Irma Grissel Amaya. El Código Penal contempla penas que oscilan de 1 a 4 años de reclusión a quien incurra en el delito de violencia intrafamiliar.
La Fiscalía de la Mujer formalizó una solicitud al Congreso para que se endurezca el castigo a quienes incurran en el delito de violencia intrafamiliar.
La petición se remitió en las últimas horas a la comisión de familia, niñez y juventud del Congreso para que se reforme el artículo 179-A y 179-B del Código Penal.
El delito de violencia intrafamiliar es una de las que mayor se denuncia en el Ministerio Público, en los que se consignan como víctimas las esposas o compañeras de hogar, hijos, entre otros miembros de la familia. “La Fiscalía ha presentado un proyecto de reforma del artículo de violencia intrafamiliar, porque hemos contemplado varias causas”, informó la fiscal especial de la Mujer, Irma Grissel Amaya. El Código Penal contempla penas que oscilan de 1 a 4 años de reclusión a quien incurra en el delito de violencia intrafamiliar.
“Esto nos ha demostrado que no es un disuasivo para el agresor y él continúa agrediendo”, lamentó Amaya. Por lo anteriormente descrito la Fiscalía de la Mujer propone elevar las penas de 3 a 6 años de prisión para quien por primera vez incurra en violencia intrafamiliar.
En casos de reincidencia se pide un castigo de un tercio de la pena, es decir de 4 a 8 años de reclusión. De acuerdo a la legislación actual, son víctimas del delito el cónyuge, excónyuge o quien haya convivido maritalmente, como los hijos. Ante ello, la Fiscalía pide incluir como víctimas del delito a otros miembros de la familia, como suegros, consuegros, cuñados, tíos o primos.
