Meriendas saludables para disfrutar

Frutas, verduras y yogur para preparar deliciosos aperitivos para todos en casa

  • 08 may 2018

SAN PEDRO SULA.

Las meriendas o colaciones forman parte de la alimentación diaria, las cuales deben ingerirse en porciones especiales para cada edad.

Se hacen dos colaciones al día -entre el desayuno y la comida, y entre la comida y la cena- y forman parte de una alimentación adecuada, pues activan el metabolismo y producen saciedad.

Además, evitan los excesos en las porciones y, así, previenen el sobrepeso y la obesidad.

Para disfrutar sus ventajas, las colaciones deben ser bajas en azúcar, sal y grasa.

Lo mejor es mezclar carbohidratos, grasas y proteínas.

Lo ideal es acudir con alguien especialista en nutrición, pues el contenido de las colaciones también depende del peso y la talla de las personas; si realizan ejercicio, o si padecen enfermedades como obesidad, diabetes e hipertensión.

Las clásicas.

Lo más recomendable son las verduras frescas, como jícamas, zanahorias y pepinos, por su aporte de fibra, lo cual produce saciedad. Las frutas frescas también son opción, aunque algunas, como el banano y el mango, deben comerse con moderación por su alto contenido de azúcar.

Si le gusta picar... El requesón, yogur natural con sal y pimienta, humus o guacamole pueden ser geniales dips para botanear saludablemente en el trabajo.

Para los gourmet. La sandía y pepino con queso feta son una gran combinación. ¿Quiere presumir con sus amigos? Agregue unas hojas de menta, no se arrepentirá.

Un toque dulce. Para combinar carbohidratos, proteínas y grasas, una porción de yogur con fruta de la estación y una cucharada de miel es una gran opción para su antojo de algo dulce.

Si le gustan las palomitas, no tiene que renunciar a ellas para cuidar su salud. Lo ideal es preferir las naturales sin mantequilla. Una taza es la medida recomendada por colación.

Si lo suyo son los sabores fuertes... Granos de café cubiertos de chocolate amargo pueden quitarle el antojo de un postre vespertino, pero trate de acompañarlos con algo que aporte proteína, como el yogur.

Si quiere meter variedad a su consumo de fruta, puede optar por la deshidratada, pero de forma quincenal o mensual porque, durante el proceso de deshidratación, se concentra el azúcar y se pierden vitaminas.

Unas minitostadas de maíz con pepino o aguacate resolverán sus ganas de comer algo crujiente. Experimente con humus, tomate y guacamole.

Un emparedado de pan integral con 60 gramos de queso panela, tomate, pepino, zanahoria y aceite de oliva es una alternativa deliciosa para esas tardes en la oficina.

Otra posibilidad son las oleaginosas, sabrosas semillas que proporcionan proteínas, vitaminas y fibra.