La actitud dice mucho de la persona, pero muchas veces se cometen pequeños errores por no analizar bien las cosas que se dicen en determinados momentos en el ámbito laboral.
¿Alguna vez ha pensado cómo perjudica en su vida laboral lo que comenta con sus compañeros de trabajo?
Está claro que un profesional es valorado por sus capacidades, su actitud ante el desarrollo, su liderazgo y otros atributos con que debe contar a nivel empresarial.
Pero, según los expertos, lo que dice puede ser usado en su contra. Los especialistas en temas laborales y el sitio web Alto nivel aseguran que entre las causas más comunes para generar un mal ambiente laboral están las siguientes: crisis de identidad derivada por distintos factores como cambios en la dirección de la empresa o fusión con otra compañía.
Esto perjudica en el campo gerencial y de nómina. Ausencia de un auténtico líder. Es uno de los males más comunes. Cuando no existe un guía, el ambiente laboral se convierte en una dinámica de mandos de poder.
Falta de identificación con la empresa por los equipos de trabajo. Falta de objetivos definidos en las organizaciones.
En estas situaciones les queda un mal sabor a los empleados. Es entonces cuando se da pie a habladurías y mala actitud en la oficina.
Debido a la importancia de cuidar lo que dice, porque en la oficina siempre hay alguien que escucha, algunos especialistas aseguran que estas frases nunca debe decirlas ni en horario de trabajo ni con compañeros, pues no solo podrían perjudicar su reputación, sino ser el pretexto perfecto para despedirlo.
No tengo tiempo para hacerlo: todos saben que el trabajo y la vida personal demandan tiempo, espacio y esfuerzo, pero también debe cuidar sus perspectivas.
No se trata de decir en todos los casos que se puede; existirán cosas que no podrá realizar y, en esos casos, lo mejor es decir la verdad. Lo que debe evitar es ser negativo y tratar de ser accesible, si tiene tiempo y puede hacerlo.
Me estresa trabajar aquí: esto se aplica al trabajo y a cualquier ámbito social. Evite ser negativo en su trabajo. Si esta actitud domina su rutina, quiere decir que debe actuar al respecto. Evite generar negatividad con sus compañeros y jefes.
Ese no es mi trabajo: no limite su carrera profesional. Crecer también involucra comenzar tareas que antes no hacía y demostrar que sí puede hacerlas.
¿Por qué yo?: no está hablando con sus padres. Este tipo de frases solo denotan una actitud infantil y poco profesionalismo. Evite a toda costa decirlas.
Crear un ambiente de chismes y habladurías no solo perjudica su imagen; también crea tensión en la oficina. Si no tiene nada bueno que decir, mejor no hable.
Tengo años trabajando y no he tenido un aumento: antes de hablar hay que ver sus acciones. No quiere decir que no lo merezca o que pedirlo y que no lo otorguen esté bien; sin embargo, eso no le ayudará a conseguirlo. Si cree que su trabajo no está valorado, tome en cuenta otras opciones.