18/04/2024
09:34 PM

Honduras: Mueren tres personas tras ataque contra vehículo

Falsos policías con chalecos antibalas asesinaron a Wilfredo Bardales y a los hermanos Jonathan y Christopher Terrero en el bulevar del norte de San Pedro Sula.

San Pedro Sula, Honduras

A pleno mediodía y en medio de un congestionado bulevar, sicarios fuertemente armados atacaron a tiros a una familia que se conducía en un vehículo pick-up y mataron a tres de sus ocupantes, entre ellos dos hermanos menores de edad.

Eran las 12:00 m cuando el pick-up Nissan Navara gris iba por el bulevar del norte, a inmediaciones de El Palenque.

El carro era conducido por Carmen Yessenia Sosa elásquez, quien viajaba con sus hijos Jonathan Terrero Sosa (15) y Cristofher Alberto Terrero Sosa (5), su sobrina de dos años y un empleado de la familia, identificado como Wilfredo Bardales (23).

La familia había salido de la aldea El Chile, municipio de Puerto Cortés, donde residían, rumbo a San Pedro Sula, con la intención de comprar útiles escolares para los menores.

No pudieron llegar a su destino. En el trayecto fueron atacados a tiros por varios individuos, quienes mataron a los dos hermanitos y al empleado de la familia; dejaron heridas a Sosa Velásquez y a su sobrina de dos años.

Terror en bulevar

Autoridades de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC), basándose en los relatos de testigos, relataron que hombres que vestían indumentaria policial atacaron a la familia con armas de grueso calibre, entre ellas AK-47 y mini-Uzi.

“Testigos expresan que varios hombres con pasamontañas se bajaron de una camioneta gris y chalecos de la Policía Nacional. Mostraron placas policiales, pararon el tráfico y cuando se acercaba el carro en que viajaba la familia los atacaron a tiros”, informó uno de los policías de investigación.

Aproximadamente dos minutos duró la balacera. Luego, los sicarios abordaron una camioneta café y huyeron por la calle a El Palenque, indicaron los que presenciaron el brutal ataque. Una patrulla policial fue la primera en llegar a la escena donde los agentes confirmaron que los dos hermanitos de 15 y cinco años murieron inmediatamente, por lo que socorrieron a la mujer, que recibió varios disparos en la cabeza, así como a su sobrinita de dos años, quien presentaba un balazo en el hombro izquierdo y al empleado de la familia, Wilfredo Bardales.

Este último presentaba múltiples perforaciones de bala, que le causaron la muerte antes de ingresar a la sala de emergencia del hospital Mario Rivas.

La mujer y su sobrinita se encuentran hospitalizadas y su estado de salud es reservado para los médicos.

Allegados de la familia se presentaron a la escena e indicaron que la señora se dedicaba a la ganadería en Puerto Cortés y que el esposo de Sosa Velásquez y padre de los niños, Javier Alberto Terreros, también fue ultimado el pasado 24 de octubre en su negocio en la aldea La Pozona, Puerto Cortés.

Autoridades de la Policía Nacional acordonaron la escena y mantuvieron cerrado más de tres horas el carril del bulevar que conduce a San Pedro Sula.

A la escena llegaron miembros del Ejército y con la Policía resguardaron el lugar.

Agentes de investigación cuentan con varias hipótesis acerca del crimen. Expresaron que el ataque era dirigido al menos a uno de los tripulantes del vehículo y no se trataba de un robo, pues ninguna de las víctimas fue despojada de sus pertenencias.

Agentes de la sección de Inspecciones Oculares de la DNIC recababan ayer pistas e indicios para dar con los responsables.

Lilian Ortega, jefa de la Sección de Homicidios de la DNIC, dijo que poseen bastantes elementos para trabajar en el caso, pero no pueden adelantar detalles que entorpezcan la investigación.

“Un grupo de agentes ya está encargado del caso. Estudiaremos varias evidencias y declaraciones de testigos para dar con los responsables. En el sector del crimen hay varios negocios que cuentan con cámaras de seguridad y sus videos serán estudiados para esclarecer los hechos”, aseguró Ortega.

Los cadáveres de los hermanos fueron trasladados a la morgue de Medicina Forense, donde fueron reclamados por sus apesarados familiares.