Tegucigalpa, Honduras.
“Déjela, usted debe seguir”, le dijo un coyote a Olga Marina López cuando su hija de 11 años se ahogó en un río en México, el hecho se produjo justo después de que la lancha en la que pretendían cruzar de forma ilegal a Estados Unidos se diera vuelta.
La niña Jenifer Ninet Gavarrete López (11) es una de las víctimas en la tragedias que ahora enluta a sus familia que vive en la comunidad de San Carlos, Omoa, Cortés.
Otra de las víctimas, según familiares, es el niño Carlos Daniel Aguilera Aguilar (7), quien salió también con su madre y un hermano mayor de la comunidad de El Porvenir, San Manuel, Cortés, con un coyote que les prometió llevarlos a Estados Unidos.
Los dos niños hondureños, según la información de sus parientes, murieron la mañana del miércoles 20 de julio cuando junto con un grupo de personas iban en una lancha por el brazo de un río que colinda con el mar.
“Lo poco que ha podido decir mi tía Olga por teléfono es que Jennifer murió ahogada cuando una gran ola se les vino encima y no pudieron rescatarla”, manifestó una de las familiares que prefirió no dar su nombre.
Cristina Gavarrete, tía de Jennifer, relató que a las 7:00 am Olga les aviso lo que había pasado y les dijo que otro niño de la La Lima, que iba con la mamá, y otro que era de El Salvador, que viajaba con el papá, también se habían ahogado.
Olga María López tiene un puesto de venta de ropa en la aldea San Carlos, de Omoa, desde hace más de un año se separó de su esposo y su situación económica no era buena, por lo que comenzó a pensar en irse a EUA.
Dos hermanos de Olga la estaban ayudando con el dinero, debido a esto le pagó a una coyota, a quien le dio una parte del dinero y el otro sería pagado al pasar la frontera.
Parientes indicaron que la abuela quería que Jennifer se quedara con ella, pero la niña les dijo que si su madre la dejaba en Honduras se iba a morir de tristeza.
La madre y su hija hicieron un primer viaje el domingo 10 de julio, pero fueron capturadas en México y regresaron el jueves 14. Olga no desistió del viaje, pues ya había pagado una parte con mucho sacrificio y las dos volvieron a emprender el trágico recorrido el domingo 17 de julio. Con mucho entusiasmo Jennifer Ninet, que cursaba el 5 grado con buenas notas, les dijo “ya verán el día de mi cumpleaños estaré en Estados Unidos. Hoy Jennifer estaría cumpliendo sus 11 años de vida, pero su familia con dolor espera que sus restos sean repatriados.
Su padre Cosme Gavarrete salió de San Carlos, Omoa, hacia Tecún, México, lugar en el que está muerta la menor que viajaba con su madre.
Ayer, los parientes del niño Carlos Daniel Aguilera Aguilar (7) buscaban información en la Municipalidad de Omoa para que el alcalde les ayudara con los trámites de repatriación. Su abuela Merida Aguilar expresó que dos de sus nietos salieron con su hija Karen Suyapa el domingo pasado hacia Estados Unidos.
Otra familia confirmó que la madre del niño se había comunicado con el padre del menor, quien está embarcado, y le contó que Carlos Daniel se había ahogado.
“Ella le contó que su hermanito mayor le estuvo dando repiración boca a boca, pero Danielito ya estaba muerto”, relató vía teléfono.
Las dos familias ahora esperan que la Cancillería los ayude.
“Déjela, usted debe seguir”, le dijo un coyote a Olga Marina López cuando su hija de 11 años se ahogó en un río en México, el hecho se produjo justo después de que la lancha en la que pretendían cruzar de forma ilegal a Estados Unidos se diera vuelta.
La niña Jenifer Ninet Gavarrete López (11) es una de las víctimas en la tragedias que ahora enluta a sus familia que vive en la comunidad de San Carlos, Omoa, Cortés.
Otra de las víctimas, según familiares, es el niño Carlos Daniel Aguilera Aguilar (7), quien salió también con su madre y un hermano mayor de la comunidad de El Porvenir, San Manuel, Cortés, con un coyote que les prometió llevarlos a Estados Unidos.
Los dos niños hondureños, según la información de sus parientes, murieron la mañana del miércoles 20 de julio cuando junto con un grupo de personas iban en una lancha por el brazo de un río que colinda con el mar.
 Familias y vecinos de la comunidad de San Carlos, Omoa, están conmocionados por la muerte de la pequeña Jennifer Ninet Gavarrete López (11), quien se ahogó en la ruta para llegar ilegal hacia Estados Unidos.
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Cristina Gavarrete, tía de Jennifer, relató que a las 7:00 am Olga les aviso lo que había pasado y les dijo que otro niño de la La Lima, que iba con la mamá, y otro que era de El Salvador, que viajaba con el papá, también se habían ahogado.
Olga María López tiene un puesto de venta de ropa en la aldea San Carlos, de Omoa, desde hace más de un año se separó de su esposo y su situación económica no era buena, por lo que comenzó a pensar en irse a EUA.
Dos hermanos de Olga la estaban ayudando con el dinero, debido a esto le pagó a una coyota, a quien le dio una parte del dinero y el otro sería pagado al pasar la frontera.
Parientes indicaron que la abuela quería que Jennifer se quedara con ella, pero la niña les dijo que si su madre la dejaba en Honduras se iba a morir de tristeza.
 El niño Carlos Daniel Aguilera Aguilar (7) es otro de los ahogados.
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Su padre Cosme Gavarrete salió de San Carlos, Omoa, hacia Tecún, México, lugar en el que está muerta la menor que viajaba con su madre.
Ayer, los parientes del niño Carlos Daniel Aguilera Aguilar (7) buscaban información en la Municipalidad de Omoa para que el alcalde les ayudara con los trámites de repatriación. Su abuela Merida Aguilar expresó que dos de sus nietos salieron con su hija Karen Suyapa el domingo pasado hacia Estados Unidos.
 El padre de la pequeña Jennifer salió hacia México a buscar el cuerpo de su hija.
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“Ella le contó que su hermanito mayor le estuvo dando repiración boca a boca, pero Danielito ya estaba muerto”, relató vía teléfono.
Las dos familias ahora esperan que la Cancillería los ayude.
