En fin, pero una vez que ya se conoce a esa persona especial, con quien ya se ha iniciado un noviazgo o relación, ¿cómo podemos saber si realmente es nuestro verdadero amor?
Varios estudiosos del tema han enumerado diversos puntos claves, a continuación resumimos los más importantes:
1. Es honesto. Existe plena confianza entre ustedes, se conocen tan bien que sabes que no existen secretos entre ustedes, ya han hablado de todos los aspectos relevantes de sus vidas.
2. Es respetuoso. El amor verdadero no es egoísta. Respeta tu tiempo y espacio, se preocupa a la vez por las necesidades emocionales no solo materiales de su pareja. Tú opinión para él, sobre cualquier tema, es importante y si están en desacuerdo, te respeta.
3. Son prioridad el uno para el otro. Es capaz de hacer cualquier sacrificio por ti y tú por él. Es amor cuando la felicidad del otro es su prioridad y te lo demuestra.
4. Siempre saca la mejor versión de ti. Desde que conoces a esa persona especial te sientes más motivada que nunca en todos los aspectos de tu vida. También es en la primer persona que piensas cuando te ocurre algo bueno, quieres compartirlo todo con él. En los momentos de duras pruebas personales o profesionales también se apoyan mutuamente.
5. Tienen en común la misma postura ante la vida. Has descubierto que aunque fueron educados con costumbres diferentes, comparten los mismos valores y actitud ante la vida. El valor de la familia es muy importante para ustedes también. Se complementan en todo.
6. Es negociador. Cuando han tenido pleitos o discusiones por algún problema, él busca solucionar los conflictos de la mejor manera posible. Este punto es bien importate, es una fantasía pensar que nunca tendrás problemas con tu pareja, la vida real no es así. Es por eso que es importante que ambos se preocupen siempre por negociar y comunicarse bien ante cualquier situación.
7. Mantiene siempre viva la llama de la pasión. El verdadero amor no permite que la rutina arruine su relación. Por eso se esmera a diario en ser cariñoso y atento. Conoce además cada uno de tus íntimos deseos y prioriza tu bienestar. No es egoísta en la cama.
8. Es detallista. No nos referimos a solo cosas materiales, sino a aquellos detalles que son mucho más importantes, como el darte un beso de despedida cuando se va a trabajar o antes de dormir, nunca olvida una fecha especial, te manda flores cuando menos lo esperas o se desvive en piropos cuando te 'produces' para salir a un lugar. En pocas palabras te hace sentir amada y deseada siempre.
9. No es dependiente. Sabes que juntos o por separados ambos tienen criterio propio y son inteligentes para la toma de decisiones. Económicamente es independiente, es una persona que sabes que trabaja y sabe administrar su dinero. Hasta el momento han sido lo suficientemente maduros para compartir los gastos de sus comidas y paseos. Jamás has sentido que se aprovecha de ti en ese aspecto. Cada uno tiene una autoestima saludable, respetan lo que tiene cada uno.
10. Tienen una relación madura. Entre ustedes no existen dramas, ambos no dudan en lo más mínimo de lo que sienten el uno por el otro, por tanto los celos no caben en su relación.
