07/12/2025
05:21 PM

¿Soy jefe o líder?

¿Alguna vez se ha cuestionado si usted es jefe o líder? Aunque no parezca fácil entenderlo hay grandes diferencias y no es asunto de nombramiento, es un asunto de actitud y de decisión. Usted decide qué ser.

Hay algunas señales que pueden mostrarle la diferencia. Al reconocerlas vemos que lo que comunmente conocemos como líder a veces es sólo un jefe, ya que no tiene la esencia de un líder. Una cosa es estar en posición y otra estar en autoridad, una cosa es tener el mando y otra es tener la capacidad de inspirar a otros. Un jefe es imitador, un líder es original; un jefe se fija en pequeños detalles, el líder tiene una visión global; un jefe acepta el promedio, un líder siempre busca la excelencia. El líder hace la excepción, desafía el promedio, marca la diferencia y lleva el paso. El jefe no tiene iniciativa propia, el líder sí la tiene. El jefe ejerce manipulación y control, infunde temor y miedo; el líder influencia por inspiración y genera confianza.

El jefe prácticamente necesita que otro lo motive, el líder se automotiva y dice, “este es el día que hizo el Señor, Dios pone el día y yo pongo la alegría y nosotros nos alegraremos”.

Siempre el jefe pregunta cómo y cuándo. El líder pregunta por qué y con quiénes. El jefe se enmarca en esquemas y teorías y el líder siempre imagina y rompe los moldes. El jefe administra, mantiene a la gente y la estructura; el líder desarrolla ante la gente e innova. El jefe se enfoca en el sistema; el líder se enfoca en la gente. El jefe es conformista, el líder está dispuesto a crecer, a desafiar y a tener expectación. El jefe da órdenes y sigue métodos mientras que el líder saca lo mejor que los demás llevan dentro inspirándoles y motivándoles. El jefe reacciona ante los acontecimientos; el líder hace que las cosas sucedan. El jefe busca explicaciones; el líder no pregunta qué pasó o qué está pasando.

El jefe reacciona midiendo las circunstancias y la profundidad del río, en cambio el líder ya ha tomado la firme resolución de pasar al otro lado.

Ante cualquiera que sea su circunstancia y los desafíos que enfrente en todas las áreas de su vida, con su familia, con sus finanzas, con su empresa, con su país, usted decide si quiere tener actitud de jefe y administrar crisis o levantarse como un líder y hacer que las cosas cambien.

Hoy usted puede decidir, ser jefe o ser líder.

El máximo Líder, nuestro Padre Celestial, a través de su hijo amado Jesucristo, dijo claramente: “hagamos”, y eso es alcanzable por usted cuando lo decida, porque al que cree todo le es posible. Tome hoy su decisión, ¿o líder o jefe?