Millones de fieles se movilizaban ayer en una nueva demostración de fe para celebrar a la Virgen de Guadalupe, considerada por sus devotos como 'la reina de México y emperatriz de América Latina', a la que le imploraron detener la creciente inseguridad en México.
Los peregrinos, que según cálculos de autoridades locales sumarán más de cinco millones, empezaron a llegar tanto de la capital como de la provincia desde el jueves hasta el cerro del Tepeyac, localizado en la zona norte de la Ciudad de México y donde se erige la Basílica de Guadalupe. Según la tradición católica mexicana, la Virgen morena se apareció a Juan Diego en el cerro del Tepeyac en tres ocasiones durante 1531, la última el 12 de diciembre, cuando la imagen habría quedado grabada en el ayate, poncho de tela burda que vestía el indígena. En el primer minuto de ayer numerosos artistas mariachis y cientos de miles de personas reunidas dentro y en las afueras del templo mariano entonaron las tradicionales 'mañanitas' mexicanas, luego el rector de la Basílica, Diego Monroy, encabezó una homilía.
Peticiones
'Nuestras calles no son seguras, hemos hecho de nuestros hogares fortalezas, vivimos espantados, tenemos miedo de salir, jugar con nuestros niños en los parques, de ver caminar a nuestros jóvenes sin que éstos sean presas de la droga, violencia, corrupción, crimen organizado, secuestros', dijo Monroy.
En este 2008, como consecuencia de la pugna entre cárteles del narcotráfico, la violencia ha alcanzado niveles sin precedente con más de 5,300 muertos, contra unos 2,600 en 2007; mientras que los secuestros suman cerca de 1,000. 'Queremos, Madre, un México más justo, solidario y democrático, en paz y sin violencia, donde la sana convivencia y la búsqueda de estos valores sean el motor que ponga en marcha a este país, a este continente y así, construir un verdadero templo y una sociedad', añadió el rector de la Basílica.
Los peregrinos fueron desfilando durante la noche del jueves a ayer frente al ayate con la imagen de la virgen, colocado en lo alto del templo, mientras conocidas figuras del espectáculo mexicano entonaron canciones durante más de cinco horas.
En otros sectores de la capital mexicana, sobre todo en barrios habitados por personas de escasos recursos económicos, durante toda la noche también se festejó a la Virgen de Guadalupe con mariachis, bailes, juegos pirotécnicos, fiestas callejeras y ferias con juegos mecánicos.
'Es un día de fiesta, cantamos y celebramos con la Virgen de Guadalupe porque es como su cumpleaños', comentó José Luis Aldama, un taxista de 56 años. AFP