El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció este viernes que continuará con la huelga de hambre iniciada hace más de 24 horas a la espera de que el Congreso apruebe la nueva ley electoral para los comicios de 2009 pero pidió a otros sectores sociales que levanten la medida por Semana Santa.
'Vamos a sostener (el ayuno). Es un esfuerzo voluntario junto a los dirigentes sociales', aseguró el gobernante entrevistado por televisoras locales cuando despertaba acomodado en un improvisado lecho en el piso de la Casa de Gobierno.
Morales afirmó que su ayuno voluntario 'es un pedido clamoroso del pueblo boliviano' para profundizar la democracia y aseguró no entender la postura de la oposición política en el Congreso, que abandonó la sesión a medianoche del jueves impidiendo que la norma se apruebe y se ponga en vigor.
La controversia sobre el proyecto de legislación electoral propuesto por el partido oficialista, el MAS, atañe a la validación de un nuevo padrón electoral, el número de bancas reservadas a circunscripciones especiales para los indígenas y el derecho a voto de los bolivianos residentes en el extranjero.
El Congreso bicameral que debate la nueva ley electoral continuaba en receso a primeras horas de este viernes luego de que la oposición abandonara la sala de sesiones descontenta con la aprobación en su primera fase, en una confusa votación.'Seguramente piensan cansarme', dijo el jefe de Estado al asegurar que no es su primera huelga de hambre y recordó que cuando lo expulsaron del Congreso, en 2004, estuvo en un ayuno voluntario 'por más de 18 días'.
En una evaluación de la medida, el mandatario señaló que es 'importante' pues en menos de 24 horas 'tenemos más de cien organizaciones sociales acompañando y más de mil huelguistas', aunque instó a los dirigentes y a los movilizados a levantar la medida de presión, por Semana Santa.
'Mi deseo es que los compañeros que han entrado ayer en huelga de hambre levanten la huelga de hambre para pasar semana santa, pero su presidente seguirá haciendo aquí la huelga de hambre', remarcó.
Evo en huelga de hambre por ley electoral
El presidente boliviano Evo Morales se declaró ayer en huelga de hambre para presionar a la oposición en el Congreso por una nueva ley electoral que guíe las elecciones de diciembre, medida rechazada por la oposición, que incluso ironizó sobre el tema.
'Frente a la negligencia de un grupo de parlamentarios neoliberales estamos obligados a tomar esta medida', dijo Morales en un discurso en el palacio de gobierno en La Paz junto a catorce dirigentes obreros y campesinos que decidieron plegarse a la huelga de hambre.
Previamente, un dirigente sindical leyó un documento en el que señalaba que un conglomerado de sindicatos oficialistas, la Central Obrera Boliviana, COB, y el Presidente se declaraban en huelga de hambre. En espera de un acuerdo parlamentario, Morales descartó expedir un decreto presidencial para convocar a elecciones generales en lugar de la ley que se debate en el Congreso.
Entretanto, la oposición política cuestionó en todos los tonos la huelga de hambre del Presidente.
'Es ridícula la huelga; quieren garantizar su reelección desesperadamente porque están enviciados y adictos al poder. Quieren quedarse muchos años en el poder para tapar la megacorrupción', dijo el influyente diputado de la agrupación Podemos, Fernando Mesmer.
El ex presidente derechista Jorge Quiroga ironizó: Luego de 'dos fiascos -amenazas de cerco campesino al Congreso y de renuncia de parlamentarios para presionar una aprobación-, entramos en la desesperación de la dieta presidencial' .
Mientras, el Congreso bicameral de Bolivia aprobó ayer por la tarde la primera fase en grande de la nueva ley electoral en una votación relámpago que sorprendió a la oposición y provocó incidentes, según imágenes difundidas por el canal del Poder Legislativo.
Se trata de la fase inicial de una votación dividida en dos fases: en 'grande' y 'en detalle', que se efectúa a mano alzada y después nominal.