Ciudad de México.
El Gobierno de Donald Trump habría retomado su controversial política de separar a familias inmigrantes en la frontera de Estados Unidos, según el testimonio de una abuela hondureña que emigró al país norteamericano junto a sus tres nietas y fueron separadas tras entregarse a la Patrulla Fronteriza.
La mujer, identificada como Juana, relató a la agencia AFP que viajó a Estados Unidos con sus nietas buscando reunirse con su hija y madre de las menores, que ingresó ilegalmente a EEUU hace siete años.
Juana, de 53 años, que se ganaba la vida vendiendo tortillas, crió a las tres niñas como hijas suyas. 'Yo les enseña a caminar, a comer y a beber', dijo.
La hondureña partió de Santa Rosa de Copán con las tres niñas huyendo de la violencia, que afirma, hay en la región.
Tras recorrer México, Juana y sus nietas cruzaron el Río Grande y se entregaron a los agentes de la Patrulla Fronteriza en El Paso, Texas.
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Allí comenzó su pesadilla. La mujer fue separada de las menores porque no era su madre. El pasado 5 de abril, tras pasar 10 días detenida, Juana fue devuelta a Ciudad Juárez, donde espera que se resuelva su solicitud de asilo.
'No se que va a pasar', afirma sobre su futuro.
Al menos 7,000 migrantes esperan en México la decisión sobre su solicitud de asilo en EEUU tras la entrada en vigor de la nueva política migratoria de Trump.
