17/04/2024
07:41 AM

Belén encanto y tradición en Jerusalén

Diario LA PRENSA realizó una visita a Belén, la ciudad en Cisjordania donde cada diciembre miles de visitantes llegan a revivir el momento más importante de la religión

    Cisjordania, Jerusalén

    Recorrer las calles santas de Belén es una experiencia únicae inolvidable. Situada a 765 m. sobre el nivel del mar a 10 km. al sur de Jerusalén es una de la ciudades más importante para el mundo del cristianismo porque es donde Jesús nació. Al caminar por sus calles se observan las tiendas con artículos tallados a mano en madera de olivo, joyas y bordados exquisitos en telas llamativas.

    Historia
    Belén es una ciudad situada en Palestina, en Cisjordania. Un enclave milenario que alberga a una de las comunidades cristianas más antiguas del mundo.

    Resaltan los nacimientos de todos los tamaños tallados en madera y recuerdos elaborados a mano que son los preferidos por millones de peregrinos que llegan a conocer ese hermoso lugar. Son muchos sus sitios turísticos pero sin duda la visita al campo de los pastores el lugar que la tradición cristiana sitúa donde tuvo lugar la aparición del Ángel del Señor diciendo: “No temáis, pues os anuncio una gran alegría, que lo será para todo el pueblo: os ha nacido hoy en la ciudad de David, un salvador que es el Cristo Señor; y esto os servirá de señal: encontrareis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre” es casi obligada. Pero, las emociones se sienten a flor de piel al ingresar a plaza del pesebre y luego a la la Basílica de la Natividad de Belén eregida en el sitio donde se encontraba el pesebre en el que nació Jesús , el famoso portal de Belén. Diario LA PRENSA estuvo ahí formando parte de una visita a Tierra Santa guiada por Arrecife Tour.

    La basílica de la Natividad tiene como fachada una muralla con a una diminuta y angosta puerta de acceso que obliga a los visitantes a agacharse para ingresar.

    Conocimos la plaza del pesebre que es practicamente el centro de la actividad religiosa en Belén. Allí es donde se realizan las celebraciones de Noche Buena año con año. La Iglesia de la de la Natividad, la Iglesia de Sta. Catalina, la Mezquita de Omar y el Centro Palestino para la Paz rodean la famosa Plaza del pesebre. Pero sin duda el momento más esperado y soñado por cualquier Cristiano es conocer la basílica de la Natividad ese precioso edificio del siglo VI reformado durante la época cruzada decorada con adornos que inspiran Navidad en cualquier temporada del año. La fachada principal es una muralla con una diminuta y angosta puerta de acceso de más o menos 1,2 metros de altura que obliga a los visitantes a agacharse y según la historia antes evitaba que los jinetes pudieran penetrar en el templo. Por largo rato hicimos fila en silencio contemplando piezas de arte antiguo y hermosos candelabros. Pero, el momento esperado estaba a punto de ocurrir ingresar a la Gruta de la Natividad, el lugar donde nació Jesús. Es un sitio de forma rectangular que puede medir unos 12,50 metros de largo, 3,50 de anchura y 3 de altura. Sus paredes está negras por el humo de las lámparas que los monjes greco-ortodoxos mantienen siempre encendidas.

    El Campo de los pastores donde el ángel anunció el nacimiento.

    Tras cruzar una puerta pequeñita que casi obliga a entrar de uno en uno lLa emoción es indescriptible al estar en el corazón de ese lugar frente a una estrella de plata de catorce puntas en el suelo nos señala el lugar donde nació Jesús. Lágrimas, emociones, alegría, esperanza todo se conjuga al estar ahí. Se lee la inscripción en latín “Hic de Virgine Maria Jesus Christus natus est”, esto es “Aquí de la Virgen María nació Jesucristo”. En esa pequeña gruta que es viistada por millones de personas durante el año también está el pesebre donde María acostó el Niño, tras envolverlo en pañales.

    La periodista Lisseth García en la gruta de la Natividad donde una estrella de plata de 14 puntas señala el sitio donde nació Jesús en Belén.

    Se observa un hueco en la roca recubierto con mármol y anteriormente lo estuvo de plata según la historia de los guias. Sin duda que para los cristianos la visita a Belen es una vivencia única con escenas y lugares bíblicos que recuerdan que Jesús nació y murió por nosotros.

    Justo al lado de la Basílica de la natividad podrá visitar la Basílica de Santa Catalina. Este templo decimonónico –aunque sustituyó a una iglesia medieval- cuenta con un precioso claustro y varias capillas cargadas de espiritualidad.

    Sin embargo, el principal atractivo de este templo se encuentra en sus grutas, y más concretamente en la Gruta de San Jerónimo. Para acceder a ella también deberá descender por debajo del suelo de la iglesia.

    De esta manera podrá descubrir a uno de los lugares más interesantes de Belén, donde San Jerónimo de Estridón se retiró para vivir una vida ermitaña al mismo tiempo que emprendía la gran labor de su vida: traducir la Biblia al latín, edición que acabaría denominándose “Vulgata”.

    Un grupo de periodistas hondureños junto a personal de Arrecife Tours y el Ministerio de Turismo en el lugar donde nació Jesús, la gruta de la Natividad.