Una franja de clima frío y nevado azota la zona noreste de Estados Unidos, dejando fuertes precipitaciones de nieve, cierre de escuelas y posible cancelación de vuelos desde y hacia la zona afectada.
Aunque de momento no se han reportado víctimas mortales, se espera que las condiciones empeoren en las próximas horas y afecten otras áreas circundantes de la región conocida como Nueva Inglaterra, que incluye a los estados de Nueva Hampshire y Maine, más al norte de Boston.
Un reporte publicado por el diario Boston Globe informaba sobre los cortes de energía producido por la caída de árboles sobre las líneas de transmisión, dejando a unas 155,000 personas en el área metropolitana de Boston sin energía eléctrica.
Locomotoras de la compañía Amtrak yacen bajo la nieve en una estación de trenes de Boston.
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Árboles caídos bloqueaban algunas calles y las autoridades advertían sobre los cables eléctricos caídos para que se mantuvieran alejados de ellos y dieran aviso a fin de que las cuadrillas de reparación se encargasen de retirarlos.
En las pareas más afectadas por la nieve las mediciones indican precipitaciones que varían entre 13 y 27 pulgadas de nieve (de 33 a 68 centímetros) acumuladas.
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A los que tienen planes de viajar en avión se les recomienda verificar el estatus de su vuelo antes de dirigirse al aeropuerto Logan de Boston, debido a que buen número de vuelos han sido cancelados por causa de las condiciones climáticas.
Se espera que las condiciones de tormenta se mantengan a lo largo del día.