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FBI contradice a Kelly sobre exfuncionario acusado de violencia doméstica

  • 13 febrero 2018 /

El FBI advirtió a la Casa Blanca hasta en cuatro ocasiones sobre el violento comportamiento de Rob Porter, asistente de prensa de Trump.

Washington, Estados Unidos.

El FBI dijo el martes que envió en julio un informe completo de seguridad sobre el asistente del presidente Donald Trump que renunció la semana pasada por acusaciones de violencia doméstica, contradiciendo la versión de la Casa Blanca.

Las declaraciones del director del Buró Federal de Investigaciones (FBI), Chris Wray, en la comisión de Inteligencia del Senado plantearon nuevas preguntas sobre por qué Rob Porter pudo continuar trabajando junto a Trump, lidiando con información altamente confidencial, teniendo solo una autorización de seguridad interina.

La Casa Blanca está bajo fuego por la partida de Porter, que fue el secretario del personal de Trump hasta que se vio forzado a renunciar la semana pasada tras divulgarse acusaciones de que abusó física y psicológicamente de dos exesposas.

Altos funcionarios de la Casa Blanca, incluido el jefe de Gabinete John Kelly, dijeron que recién se enteraron de estas acusaciones contra Porter cuando los medios informaron del tema el 6 de febrero.

Pero el FBI entrevistó a ambas exesposas de Porter el año pasado en el marco de su verificación de antecedentes para emitir su autorización de seguridad.

Wray dijo el martes a la comisión de Inteligencia del Senado que el FBI presentó un informe de autorización preliminar en marzo del año pasado y un informe final en julio. Se hizo un seguimiento en noviembre y el archivo oficial se cerró en enero.

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Sin embargo, un portavoz de la Casa Blanca, Raj Shah, dijo el jueves, un día después de la renuncia de Porter, que el proceso no había terminado. 'Su investigación de antecedentes estaba en curso', dijo Shah.

Por su cargo, Porter debía manejar materiales muy sensibles en la Oficina Oval, lo que debería haber hecho su autorización de seguridad una prioridad después de que Trump asumió el cargo en enero de 2017.

Kelly, jefe de Porter, ha tenido problemas para explicar por qué un asistente de Trump con esos antecedentes podría haber tenido autorización para ver materiales secretos.