Tanto en dietas de adelgazamiento como para mantener un buen estado de salud en general, los nutricionistas recomendamos el consumo de agua con limón, pero no porque si lo tomas a diario se vayan a ir los kilos de más por arte de magia, sino porque nos va a ayudar, sobre todo, a la hora de eliminar toxinas. Pero sus beneficios van más allá.
El limón es un fruto con un excelente poder antiséptico y alcalinizante, es cicatrizante y desinfectante, tonifica el organismo y elimina toxinas. Intensifica las defensas del organismo, purifica la sangre, elimina y reduce los cálculos, evita hemorragias intestinales y hemorroides y previene y cura las afecciones de garganta. Además, es ideal contra las enfermedades del hígado (cirrosis e ictericia), del páncreas, del aparato urinario y del riñón.
Sí que es verdad que, a pesar de todos los beneficios citados, no es muy recomendable abusar del limón, no más de un limón al día y, si puede ser, mejor mezclado con agua, ya que en grandes dosis puede provocar una pérdida excesiva de minerales, provocando anemia, descalcificación ósea, gastritis o hipotensión.
Beneficios de tomar con limón
Se recomienda tomar un litro de agua con medio limón, sobre todo en ayunas. ¿Cuáles son sus beneficios?
Ayuda a limpiar la piel. Gracias a la vitamina C nos puede ayudar a mantener una piel libre de bacterias que pueden causar acné, además de ayudarnos a acabar con cicatrices y manchas.
Depurador hepático.
Equilibra los niveles de pH: es un excelente alcalinizante. Por esta misma razón, se recomienda su consumo después de realizar ejercicio para reducir los niveles de ácido láctico en nuestro organismo.
Tiene efecto diurético.
Nos ayuda frente a cualquier problema del aparato respiratorio.
Es hidratante.
Estimula el sistema inmunológico. La vitamina C posee efectos antiinflamatorios, nos ayuda a la absorción del hierro y a la prevención y curación de resfriados.
Refresca el aliento. Además nos alivia el dolor dental y la gingivitis.
Nos ayuda frente al estreñimiento. Mejora la movilidad intestinal, aunque no en todos los casos, puede haber alguna excepción.
Nos mantiene animados y con más energía. Debido al contenido en vitaminas y minerales procedentes del limón y el agua, se recomienda a personas con estrés y ansiedad ya que ejercerá un efecto positivo en el sistema nervioso.
En caso de sufrir acidez o malas digestiones, el agua con limón es perfecto para alcalinizar y neutralizar estos síntomas.
