16/04/2024
04:13 PM

'Te rompe el corazón ver tanta gente morir”: Rigoberto Rivas

“Espero que la población en Honduras vea lo que estamos viviendo en Italia, esto no es un juego, es algo muy serio y peligroso”, relata el volante de la Selección.

    Roma.

    En un abrir y cerrar de ojos todo cambió en Italia, las personas hicieron caso omiso a las indicaciones de las autoridades y hoy el país se encuentra inmerso en lágrimas y dolor, con tristeza por las 5,500 muertes por este virus.

    El volante hondureño del Reggina de Italia, Rigoberto Rivas, ha sido testigo de ese drama. El coloneño observa cómo la vida les ha cambiado, ahora la incertidumbre los acompaña en las calles donde antes todo era alegría y ahora confinados en sus habitaciones observan desde la ventana cómo el silencio y el miedo se apoderó de sus vidas.

    “Mi vida en estos momentos es permanecer en casa las 24 horas, encerrado, sin mi familia y sin posibilidad de verlos. Tampoco puedo ver a mis amigos. Ya no hay entrenamientos con el club, me toca entrenarme solo, no hay salidas con amigos a los restaurantes. Me toca cocinar, se acabaron las salidas, ahora lo que hay son videollamadas, esa ha sido mi vida estos últimos 12 días desde que iniciamos la cuarentena”, indicó Rivas.

    El joven futbolista lamenta mucho la situación que vive en el país que le adoptó y le ha dado la oportunidad de apuntalar su carrera como futbolista. “Gracias a Dios mi familia me preparó para vivir solo, salí de casa a los 16 años y desde ese entonces soy una persona bastante independiente, me siento capaz de jugármela solo, aunque para serle sincero, hubiese preferido estar con mi familia durante este tiempo tan duro”, dijo el talentoso mediocampista.

    ¿Cómo se mantiene físicamente durante este periodo de tiempo?

    El equipo nos brindó una rutina de entrenamiento, la cual debo de seguir el tiempo que sea necesario, las indicaciones de ellos incluyen la recomendación de no salir de casa y entrenar, ellos no ven esto como vacaciones y nosotros como jugadores tenemos la responsabilidad de realizar nuestro trabajo.

    El programa de entrenamiento incluye muchas cosas que se pueden hacer en casa y aunque no cuento con mucho espacio, me toca entrenar en la sala, la cocina, el cuarto, donde sea necesario, nuestras rutinas incluyen trabajos de fuerza, velocidad, reacción, uno busca cómo ser productivo con lo que tiene y hasta el momento físicamente estoy muy bien.

    ¿Como se siente al ver que su país de adopción sufre la muerte de tanta gente?

    Es doloroso ver que mueren arriba de 600 personas diariamente, queremos que pase esto ya, hay mucho dolor en este país, nos han golpeado muy fuerte, te rompe el corazón ver tanta gente morir, el miedo se apodera de ti cuando te acercas a la ventana y no ves a nadie, lo único que nos acompaña es un silencio absoluto y el temor.

    ¿Siente que esto va para largo o tiene la seguridad que ya va a acabar?

    Para serle muy sincero, esto va para largo, me llena de tristeza, pero no creo que esta situación acabe pronto, cuando uno ve que no se reduce la cantidad de muertos y que, al contrario, cada día mueren más personas te golpea duramente, esta es la realidad que vivimos, te levantas esperando recibir buenas noticias y nunca llegan.

    ¿Qué opina del sistema de salud de Italia?

    Pienso que tenemos de los mejores doctores del mundo, ellos advirtieron a la población sobre este virus y la gente no quiso escuchar, ellos son muy capaces y se prepararon para esto, el problema fueron los habitantes que ignoraron las advertencias y allí están las consecuencias, si la población se hubiese quedado en casa no estuviéramos viviendo esto. Ahora ya nadie sale y no es porque este la policía afuera, en algún momento se dieron cuenta de que esto era serio, vieron que muchas personas estaban muriendo, entonces hoy que ya todo se salió de control, es que han decidido permanecer en sus casas.

    ¿Te preocupa que el coronavirus haya llegado a Honduras?

    Espero que la gente en Honduras vea lo que estamos viviendo en Italia, esto no es un juego, es algo muy serio y peligroso, pese a ser un enemigo que no podemos ver, estamos en la obligación de protegernos y seguir las indicaciones de las autoridades, deben de entender que muchas de las cosas que desean hacer en la calle no son útiles o importantes en este momento, compren su comida y no cometan el error que cometimos en Italia.

    Rivas Vindel ha compartido ampliamente sus experiencias con este coronavirus, su familia reside en Honduras, pero él tiene la confianza plena en que acataran a cabalidad las disposiciones de las autoridades y sus consejos. Para las personas que no se toman esta pandemia como algo real, el joven futbolista enfatizó en la importancia de tomar medidas de precaución tomando en cuenta la fragilidad del sistema de salud hondureño.

    “Con todos los recursos económicos que tiene Italia, este virus tan peligroso ha causado un dolor y tristeza incomparable, no me quisiera imaginar lo que podría hacer en Honduras, nosotros somos un país chico y humilde, espero que seamos por nuestra situación más conscientes de los riesgos que corremos al desobedecer las recomendaciones, esto es mortal y se debe crear conciencia y no ser irresponsable”, señaló desde Italia el futbolista hondureño.

    ¿Se encuentra conforme con la cancelación de los partidos que debía disputar con la selección nacional?

    Antes de que se suspendieran los torneos internacionales y el amistoso contra la República Checa sentía que no iba a poder asistir, no tenía deseos de moverme de Italia, miraba como un riesgo muy grande el tener que subirme en un avión para luego llegar a un aeropuerto en México y que me exigieran permanecer en cuarentena solo porque vengo de Italia, inclusive en Honduras, capaz que las autoridades hacían lo mismo y es entendible, en ese caso ni hubiese jugado los partidos.

    “Le planteé mis inquietudes al gerente de la selección (Gerardo Ramos) y me pidió que no me preocupara, me dejó claro que no me arriesgarían a vivir una situación como esa, él entendía que era una situación muy seria y respaldaba mis miedos, me sentí respaldado y unos días después se anunció la suspensión de todo, lo cual considero fue una medida muy acertada”.