17/04/2024
01:46 PM

Calificación de Moody’s ahuyenta la inversión en Honduras

La nota B2 negativa para Honduras significa un duro revés para los bonos soberanos.


La
calificación negativa de Honduras por parte de Moody’s
representa un fuerte golpe para la economía del país, porque ahuyenta la inversión extranjera, hace casi imposible la firma de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la colocación de los bonos soberanos en el exterior, coincidieron ayer expertos en finanzas.

Una de las principales conclusiones de los analistas económicos es que Moody’s al degradar la nota a B2 Negativa le está advirtiendo a la comunidad internacional del peligro que representa invertir en Honduras.

Gabriela Núñez, exministra de Finanzas, expuso que la calificación de Moody’s es una fuente de referencia muy importante para la toma de decisiones y de inversión que hacen las empresas extranjeras.

La agencia internacional Moodys rebajó el martes la calificación de la deuda de Honduras de estable a negativo, situándola en la categoría B2 Negativa, equivalente a un país con poca probabilidad de pago oportuno de su deuda.

Un comunicado de prensa de la agencia menciona que entre los motivos para rebajar la calificación se encuentran “el deterioro fiscal del Gobierno en 2012, la poca probabilidad de una consolidación fiscal significativa en 2013 debido a que es un año electoral y un deterioro de las finanzas externas incluyendo un déficit por cuenta corriente que aumenta”.

El problema fiscal del país se agravó “debido a la finalización de un programa del Fondo Monetario Internacional en marzo de 2012 por el que el Gobierno perdió acceso a apoyo presupuestario de agencias multilaterales”, explica el comunicado de Moody’s.

“La opinión de Moody’s es que es poco probable que el Gobierno llegue a un acuerdo con el FMI este año, por la próximas elecciones presidenciales en noviembre de 2013”, dijo la agencia en un reporte.

La nota B2 Negativa significa que el país ha perdido capacidad de cumplir los compromisos de pago de deuda en moneda extranjera y nacional, principalmente esta última que es donde el gobierno de Porfirio Lobo ha tenido que negociar refinanciamientos con sus acreedores por la falta de recursos para amortizar capital e intereses. El servicio de deuda con los acreedores bilaterales y multilaterales está al día.

Golpe a bonos soberanos

Al tener casi agotadas las fuentes de financiamiento internas y externas para acceder a recursos, el gobierno de Lobo Sosa logró a finales de noviembre de 2012 que el Congreso Nacional le autorizara la emisión de 750 millones de dólares para ser colocados en el extranjero, equivalentes a 15,000 millones de lempiras.

Los inversionistas usan la escala de rating que aplica Moody’s, la que va desde AAA hasta C y comprende 21 grados. Se divide en dos categorías, de inversión y especulativa. Honduras se encuentra en la categoría especulativa, que es la B (B1, B2, B3), siendo su última nota B2 Negativa.

Esta categoría significa que carece de las características de una inversión deseable: los títulos que reciben esta calificación tienen una calidad de crédito pobre. Están sujetos a especulaciones y “alto riesgo crediticio”. No reúne las cualidades deseables para un instrumento de inversión. Tiene limitada seguridad en el cumplimiento del pago de intereses y capital en el largo plazo.

Cuando Honduras decide colocar los bonos soberanos en el mercado internacional, el inversionista internacional tomará como referencia las calificaciones que otorga Moody’s, en donde quedará reflejado que Honduras es un país con problemas para cumplir con las obligaciones financieras contraídas.

Federico Álvarez, expresidente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), dijo que la calificación negativa de Moody´s es un golpe para la economía hondureña; “pero lo peor es que esa calificación es con tendencia a empeorar”.

“El problema de esta calificación en este momento es que justamente por lo difícil de la situación económica, es que todas las esperanzas para financiar el presupuesto estaban cifradas en la colocación de bonos soberanos en ese mercado que nunca habíamos acudido, Moody’s da este golpe, eso hace tremendamente difícil y tremendamente caro acudir a ese mercado”, dijo Álvarez.

Mauricio Díaz Burdeth, director del Foro Social de la Deuda Externa de Honduras (Fosdeh), dijo que la calificación de Moody’s “es una noticia fuerte y desfavorable” porque el Gobierno tenía las esperanzas puestas en los bonos soberanos para obtener recursos frescos.

Díaz coincidió en que con esta calificación también es “sumamente difícil” que el país firme un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, porque ya hay un ambiente en contra.

“Tenemos que hacer un esfuerzo muy grande por mejorar el déficit fiscal, uno de ellos es implementar un plan anticorrupción para eficientar recursos, así como solicitar un plan de rescate como lo hemos sugerido desde hace algún tiempo”, indicó Díaz.

Carlos Urbizo, economista sampedrano, explicó que la importancia de la calificación de Moody’s en el mercado internacional es que es la base para establecer el costo del dinero. “La regla es bien sencilla, entre peor es la calificación, mayor es la tasa de interés que tiene que pagar una institución o un Gobierno por ese dinero”, dijo.

“Hay otros que no les importa la calificación, incluso hay quienes se especializan en hacer inversiones y en empresas de alto riesgo porque tienen altos premios y están dispuestos a hacer el esfuerzo necesario para tener su premio”, agregó Urbizo.
Descalabro financiero

Un informe publicado ayer por el Banco Central de Honduras (BCH) revela que el saldo de la deuda pública interna del Gobierno fue de 54,522.6 millones de lempiras al cierre de 2012, con un incremento de 6,442.6 millones respecto al año previo, cuando llegó a 48,080 millones.


En los tres primeros años de gestión de la administración de Porfirio Lobo, el saldo del endeudamiento interno pasó de 22,988.3 a 54,522.6 millones de lempiras, con un incremento de 31,534.3 millones y 137.2 puntos en valores porcentuales.

A diciembre de 2009, el saldo de la deuda nacional fue de 22,988.3 millones de lempiras, en 2010 se disparó a 37,420.1 millones, en 2011 aumentó a 48,080 millones y en 2012 totalizó 54,522.6 millones.


En comparación al Producto Interno Bruto, el saldo de la deuda interna sobre el PIB es de 13.7%.

Según las estimaciones de la Secretaría de Finanzas, el Gobierno tiene asignada una partida de 15,249.9 millones de lempiras para el pago del endeudamiento local.Eso significa que por cada lempira recaudado, el Gobierno hondureño destinará este año 30 centavos para cumplir con el pago del financiamiento contratado.

Maduro: “Difícil que el Gobierno firme con el FMI”


El expresidente Ricardo Maduro analizó ayer que
la caída de Honduras de estable a negativo en la evaluación de la calificadora internacional Moody’s, “es preocupante” pues dificulta la capacidad de atraer la inversión.

“Ahuyenta la inversión extranjera y ahuyenta la local también, entonces tenemos que trabajar por lograr recuperar y fortalecer la imagen de Honduras y la credibilidad del país”, recalcó el exgobernante.

Maduro coincidió con Moody’s en que es muy difícil que el Gobierno de Porfirio Lobo logre suscribir un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

Señaló que sería mucho aspirar a que se pueda lograr una estabilidad fiscal y reducir el déficit a entre un 2 y 3%, debido a que Honduras tiene una escasa capacidad de acceso a fondos concesionales.

Callejas: “Venimos decayendo desde el gobierno de Zelaya”


“Eso nunca es bueno”, expresó el expresidente de la República Rafael Leonardo Callejas, al referirse a la calificación negativa que otorgó
Moody’s a Honduras.

“Implica un mayor costo en lo que llaman la prima de riesgo, pues los bancos ven la debilidad del país”, dijo Callejas. Según el exgobernante, la calificación de esa agencia internacional trata de una imagen que no es la mejor para Honduras. “Uno quisiera tener una calificación triple A”.

“Venimos decayendo con estas agencias Moody’s y Standard and Poors desde el gobierno de Zelaya (Manuel Zelaya)”, aseveró Callejas.

“Presumo que habría que pagar un interés más elevado por los bonos soberanos, pues es lo que ocurre cuando una agencia publica una calificación negativa, el costo se eleva”.

Raf Flores: ¿Quién va a comprar los bonos?


“Si usted cae en una calificación de B, en la jerga internacional significa que si usted quiere un bono corre riesgo que cuando se venza no le puedan pagar”, ejemplificó Raf Flores, subdirector del Fosdeh, al explicar que la calificación de Moody’s hace más difícil la colocación de bonos soberanos en el mercado internacional.

Flores preguntó ¿quién va a comprar los bonos hondureños en el exterior?, a lo que seguidamente respondió: “Ellos analizarán el riesgo de invertir sus recursos con todas las variables posibles”. Según Flores, esta situación se debe a que ha faltado disciplina fiscal en el país, lo que compromete a todos los agentes económicos.

Honduras puede colocar los bonos soberanos en el país, pero ya no a un 5%,
sino por un interés mayor por el riesgo que Moody’s le da a Honduras.