El déficit habitacional en San Manuel se agudizó por la llegada de la industria maquiladora en los municipios aledaños, ya que muchos llegaron para trabajar y no encontraron opciones de vivienda.
El alcalde José Ramón Martínez manifestó que en 2005 más de 400 familias vivían en condiciones infrahumanas.
Éstas permanecían en casas de naylon y de cartón en la carretera a San Manuel por los accesos de La Lima y Villanueva, formando cordones de miseria.
El edil señala que por la necesidad de viviendas de gran parte de la población, la Alcaldía se vio obligada a hacer el proyecto Vivienda Solidaria. El censo empezó con dos mil familias que carecían de casas.
El proyecto fue presentado al gobierno del ex presidente Manuel Zelaya, donde se comprometieron a construir 100 viviendas, de las cuales Soptravi sólo construyó veinte.
Otros donativos
Con la organización Food for the Poor se construyeron más de 400 casas.
Según Martínez, la mayoría de las familias que carecen de una casa provienen del interior del país y laboran en las maquilas de La Lima y Villanueva y no pueden rentar en esos municipios; por ende, se acomodan en las mismas condiciones. “Las maquilas han creado una esperanza de vida en muchos pobladores del interior”, comentó.
Eso ha generado no sólo el crecimiento poblacional, sino el escolar, porque los alumnos de San Manuel son más de ocho mil y esa cifra se duplicó en menos de tres años debido a la inmigración.
Urbanizaciones
Muchas compañías urbanizadoras concentradas en el municipio no benefician a los residentes de San Manuel porque la adquisición de una de esas viviendas no está al alcance de los pobladores.
El ingreso promedio de las familias de ese municipio es el salario mínimo y los que compran en esas lotificaciones deben tener por lo menos tres salarios mínimos.
San Manuel tiene una población de 50 mil, pero se estima que debido a la inmigración hay un exagerado grupo flotante.