El Gobierno reactivará el Plan Nacional de Cajas Rurales con el fin de permitir el acceso y disponibilidad financiera a pequeños productores del país.
Actualmente el país cuenta con más de cuatro mil cajas rurales con una membresía de cerca 86,000 socios, por lo que se pretende potenciar mecanismos de capitalización para poder canalizar de manera más eficiente los proyectos de desarrollo que la Secretaría de Agricultura y Ganadería, SAG, implementará.
La Cajas Rurales manejan un capital de 353 millones de lempiras. Hay experiencias bastante exitosas en el país sobre este modelo, que les ha permitido capitalizarse, tener acceso a la tierra y poder diversificar y dar mayor valor agregado a los productos.
La idea del Gobierno es lograr poner este mecanismo a disposición de más productores y fortalecer el sistema y certificarlo para garantizar el ahorro y el esfuerzo de los pequeños productores.
“Queremos promover el ahorro, la coinversión y el uso racional de los recursos naturales, en apoyo a la gestión local y el combate a la pobreza rural”, manifestó el ministro de la SAG, Jacobo Regalado.
El ministro de Programa Nacional de Desarrollo Sostenible, Pronaders, Mario Pineda, añadió que lo anterior fue aprobado en Consejo de Ministros, en el que participaron además la Secretaría de Finanzas y el Ministerio de Desarrollo Social, con lo que pretende modificar el plan y políticas de cajas rurales, para que cada una de ellas tenga el mismo accionar.
Añadió que dichas cajas funcionan en 17 departamentos y dentro de poco se incluirá a Islas de la Bahía a fin de validarlas, por lo que sigue luego de este proceso es que conjuntamente con el Programa Nacional de las Naciones Unidas, Pnud, la Japan International Cooperation Agency, Jica, la Organización para la Agricultura y la Alimentación, FAO.
Así como el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola, Fida, y la Fundación para el Desarrollo Rural Empresarial, Funder, todo el accionar se haga bajo una misma ley, a fin de hacer conjuntamente las modificaciones pertinentes.
El Plan de Cajas Rurales dependerá de Dinaders y comenzará con un fondo de 20 millones de lempiras para la conformación y certificación de las mismas, ya que parte de la estrategia es contar con un ente certificador que garantice el buen uso de los recursos para que el pequeño productor tenga una garantía.