Tegucigalpa. La vieja maquinaria, que fue forzada a cumplir funciones de impresión de tarjetas de identidad en el reciente proceso electoral, está dañada.
El equipo por ahora está paralizado porque no aguantó la presión del trabajo al que fue expuesto al imprimirse, por razones políticas, alrededor de un millón de tarjetas de identidad, de las cuales más de 700 mil fueron nuevos electores.
Por esta causa, el Registro Nacional de las Personas (RNP) tiene suspendida la impresión de identidades a la espera de que las impresoras de origen francés, que tienen casi 25 años de vida útil, sean reparadas por lo menos parcialmente.
“Ya no aguanta más, son más de 20 años, los repuestos no se encuentran en el mercado, cada vez que se daña una tuerca, un tornillo, hay que mandar a tornos especiales a hacerla”, dijo Juana Cárcamo, subgerente del Programa de Identificación Nacional (PIN).
Concluido el proceso electoral, el RNP optó por suspender la producción de identidades para darle paso a una revisión de la vetusta maquinaria.
Solamente se están recibiendo las solicitudes y, salvo en casos de emergencia justificada, se puede mandar a hacer una identidad, expuso la funcionaria.
De manera que tocará a la clase política determinar con qué maquinaria se encararán las nuevas elecciones y si se usará el mismo diseño de tarjeta de identidad, que también data desde hace 20 años.
Por lo menos más de tres millones de tarjetas de identidad fueron emitidas entre 1996 y 2000, lo que ha obligado al Congreso Nacional a prolongar su vigencia en más de una ocasión.
La Ley del RNP habla de modificar la fotografía de la tarjeta cada 10 años, pero esto no se ha podido hacer porque implica adquirir una nueva maquinaria con capacidad de ajustarse a un nuevo diseño y a otro tipo de papel, que seguramente será el policarbonato. La actual maquinaria fue forzada a trabajar las 24 horas durante los tres meses de campaña de 2013.
“Estuvimos cruzando los dedos para que realmente saliéramos bien y salimos bien, pero la maquinaria sufrió un desgaste y ahorita estamos paralizados”, dijo la subgerente del PIN.
“Le estamos dando mantenimiento en la medida que podemos, ahorita solo estamos atendiendo emergencias”, agregó.
